Título: Gallinas Autora: Jackie Polzin
Páginas: 232 pág.
Editorial: Libros del Asteroide
Precio: 18,95 euros
Año de edición: 2022
Original libro que, como su nombre indica, nos habla mucho de gallinas. Jamás hubiéramos pensado que se pudiera escribir una novela con estas aves de corral como hilo conductor. Pero es evidente que se trata de mucho más que una especie de tratado surgido de su observación detallada.
No cabe duda de que la autora tiene gallinas, porque no podría de otro modo reflejar con tanta certeza no solo sus movimientos, sino también las formas de establecer sus relaciones jerárquicas —hay gallinas alfa y beta nos cuenta— o las maneras que utilizan para exteriorizar el miedo y otras de sus percepciones de lo cotidiano y también de lo extraño. Así pues, aprendemos muchas cosas que no se nos hubieran ocurrido a quienes no hemos reparado nunca en estos animales, de los que apenas sabemos lo que nos interesa, que son estupendos para la alimentación humana. Pero también aprendemos que cazcalear, como hacen las gallinas, es, según la RAE, «esa manera de andar de una parte a otra fingiendo hacer algo útil» y que nos hace sonreír porque ¿quién no ha cazcaleado alguna vez y quién no se ha preguntado o ha fantaseado con lo que haría una persona a la que hemos descubierto cazcaleando?
La estructura en capítulos muy pequeños facilita la diversidad de temas de los que trata, unas veces sugeridos por las gallinas que, naturalmente, son una presencia permanente y otras en las que la inspiración es su vida de pareja, su amistad con su mejor amiga Helen, su trabajo de limpiadora de casas antes de ponerlas a la venta, el niño de su amiga o la pérdida del suyo. Una diversidad de temas de su cotidianidad que nos cuenta en primera persona, lo que aporta la necesaria verosimilitud, que se refuerza al saber que la autora vive en una granja localizada en un pequeño pueblo de Minnesota, lugar en el que se ubica la historia, que tiene dos gallinas y que sufrió un aborto.
A lo largo de la lectura vamos aprendiendo con la propia narradora que al principio no sabe nada de gallinas. Es un recurso interesante porque de esa manera, acompañándola en sus descubrimientos y haciéndolos nosotros a la vez, empatizamos con ella y al final, aunque nunca haya pasado por nuestra imaginación un acercamiento amable a esos animales, logramos entenderla a ella que sí ha desarrollado sentimientos por ellos.
Estamos ante un relato de las pequeñas cosas que llenan los días, aparentemente fútiles, pero que son las que conforman la vida. Esto, que quizás se nos pudiera antojar como aburrido, gracias a la frescura de la forma de narrar de la autora, al sentido del humor y a la inteligente mezcla de temas, se transforma en un texto amable de lectura fácil que nos provoca una sonrisa cuasipermanente.
Al igual que los capítulos, utiliza la brevedad para expresar sus pensamientos, aparentemente sencillos, pero esa sencillez buscada esconde más complejidad, y resulta que cuanto más profundas son sus reflexiones, más leve es la expresión. Es como si buscara no apenar al lector cuando los temas son difíciles para la narradora, como su certeza de la imposibilidad de ser madre o la causa de su apego a las gallinas.
Un libro sorprendente que se lee con una sonrisa y al final, nos toca el corazón.
De Jackie Polzin se sabe poco más que es de Minnesota, donde vive, y que ha sido ganadora del Premio Art Seidenbaum a la Primera Ficción. En estos momentos está trabajando en un proyecto de novela gráfica con su hermana, que es pintora. La traducción ha sido realizada con gran delicadeza por Regina López que nos hace llegar muy bien el aliento poético de muchas reflexiones de la autora.
Publicado por Paloma Martínez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario