Título: El pozo
Autora: Elizabeth Jolley
Páginas: 240
Editorial: Alfaguara
Precio: 17 euros
Año de edición: 1989
Esta curiosa y perturbadora novela, publicada originalmente en 1987, cuenta la extraña historia de Hester, una pequeña terrateniente australiana, dueña de una granja, mucho terreno y una mansión, que adopta una joven huérfana, Kathy, que trae la alegría a su casa y de la que se acaba enamorándose platónicamente hasta los huesos.
Su nueva situación cambia toda su vida, para sorpresa de sus vecinos, y el lector sabe desde el primer capítulo que tan peculiar panorama está relacionado con un crimen y un cadáver que alguien arroja a un poco seco durante la noche.
Una novela llena de misterios, trucos y sugerencias insinuadas bajo la superficie de un texto sencillo que se lee muy bien, pero que trae una inquietud nueva para lector en cada página. Un texto urdido con habilidad, que admite más de una interpretación y varias explicaciones durante buena parte de su desarrollo, hasta llegar a un desenlace abierto y completamente inesperado, que abre más incertidumbres y misterio.
Una obra con una estructura peculiar. Comienza in media res, con la narración del crimen, deja muchos cabos sueltos, luego emplea media novela en llegar hasta ese momento y la segunda parte de la novela se adentra en terreno desconocido, dejando en cada capítulo más preguntas que respuestas.
Un thriller, potente y genial, que recuerda a Alfred Hitchcock y sobre todo a Patricia Highsmith, lleno de posibilidades, perverso y retorcido, en el que la tesis parece ser que es más fácil de resolver cualquier enigma criminal, por complejo y difícil que parezca, que los enigmas del corazón.
Una novela de intriga fenomenal, que ofrece de propina una buena descripción de cómo se vive en la Australia rural y profunda, algo difícil de encontrar porque no se ha vuelto a editar, pero con la que se disfruta mucho pasándolo mal. Estupenda.
Elizabetth Jolley (Birmingham, 1923-2007) fué una escritora inglesa que vivió en Australia desde los 27 años. Hija de padre inglés y madre austríaca, nació con el nombre de Elizabeth Knight. Fué educada en casa con profesores particulares hasta los diez años. Durante los años 30, su familia acogió a refugiados de toda Europa, lo que estimuló su imaginación y llenó su hogar de un mundo misterioso, según sus propias palabras.
A los 17 años empezó a estudiar enfermería ortopédica en Londres. Tuvo un romance con uno de sus pacientes casados, Leonard Jolley, y se quedó embarazada casi al mismo tiempo que la mujer de Leonard. Se fué a vivir a casa de los Jolley y su hija, Sarah, nació cinco semanas antes que Susan, la hja de los Jolley.
Leonard y Elizabeth se casaron, se fueron inmediatamente a vivir a Australia y durante cierto tiempo, Leonard hizo pasar a Elizabeth por su primera mujer. La pareja tuvo tres hijos más, él trabajó como bibliotecario y ella desempeñó lo más variados oficios, enfermera, vendedora a domicilio, limpiadora, granjera... hasta que publicó su primer libro, un volumen de relatos a los 53 años.
Esta curiosa y perturbadora novela, publicada originalmente en 1987, cuenta la extraña historia de Hester, una pequeña terrateniente australiana, dueña de una granja, mucho terreno y una mansión, que adopta una joven huérfana, Kathy, que trae la alegría a su casa y de la que se acaba enamorándose platónicamente hasta los huesos.
Su nueva situación cambia toda su vida, para sorpresa de sus vecinos, y el lector sabe desde el primer capítulo que tan peculiar panorama está relacionado con un crimen y un cadáver que alguien arroja a un poco seco durante la noche.
Una novela llena de misterios, trucos y sugerencias insinuadas bajo la superficie de un texto sencillo que se lee muy bien, pero que trae una inquietud nueva para lector en cada página. Un texto urdido con habilidad, que admite más de una interpretación y varias explicaciones durante buena parte de su desarrollo, hasta llegar a un desenlace abierto y completamente inesperado, que abre más incertidumbres y misterio.
Una obra con una estructura peculiar. Comienza in media res, con la narración del crimen, deja muchos cabos sueltos, luego emplea media novela en llegar hasta ese momento y la segunda parte de la novela se adentra en terreno desconocido, dejando en cada capítulo más preguntas que respuestas.
Un thriller, potente y genial, que recuerda a Alfred Hitchcock y sobre todo a Patricia Highsmith, lleno de posibilidades, perverso y retorcido, en el que la tesis parece ser que es más fácil de resolver cualquier enigma criminal, por complejo y difícil que parezca, que los enigmas del corazón.
Una novela de intriga fenomenal, que ofrece de propina una buena descripción de cómo se vive en la Australia rural y profunda, algo difícil de encontrar porque no se ha vuelto a editar, pero con la que se disfruta mucho pasándolo mal. Estupenda.
Elizabetth Jolley (Birmingham, 1923-2007) fué una escritora inglesa que vivió en Australia desde los 27 años. Hija de padre inglés y madre austríaca, nació con el nombre de Elizabeth Knight. Fué educada en casa con profesores particulares hasta los diez años. Durante los años 30, su familia acogió a refugiados de toda Europa, lo que estimuló su imaginación y llenó su hogar de un mundo misterioso, según sus propias palabras.
A los 17 años empezó a estudiar enfermería ortopédica en Londres. Tuvo un romance con uno de sus pacientes casados, Leonard Jolley, y se quedó embarazada casi al mismo tiempo que la mujer de Leonard. Se fué a vivir a casa de los Jolley y su hija, Sarah, nació cinco semanas antes que Susan, la hja de los Jolley.
Leonard y Elizabeth se casaron, se fueron inmediatamente a vivir a Australia y durante cierto tiempo, Leonard hizo pasar a Elizabeth por su primera mujer. La pareja tuvo tres hijos más, él trabajó como bibliotecario y ella desempeñó lo más variados oficios, enfermera, vendedora a domicilio, limpiadora, granjera... hasta que publicó su primer libro, un volumen de relatos a los 53 años.
Elizabetth escribía desde los 20 años, peo no había conseguido publicar sus obras hasta entonces, se dice que por tener un estilo demasiado moderno. Publicó 5 libros más de relatos y 15 novelas, enseñó creatividad literaria en la Universidad de Curtin, en Perth, con éxito, ya que varios de sus alumnos ganaron premios importantes y se hicieron escritores conocidos, y obtuvo ella misma una larga lista de premios, hasta 16.
Elizabeth Jolley
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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