Título: La cartuja de Parma
Autor: Stendhal
Páginas: 616
Editorial: Alianza
Precio: 14,90 euros
Año de edición: 2004
La historia del joven Fabricio del Dongo, prototipo del carácter romántico que admira a Napoleón, llega a estar en la batalla de Waterloo y trata de hacer carrera dentro de la Iglesia, no tuvo muy buena acogida cuando se publicó, en 1839, y sólo recibió los elogios de Honoré de Balzac, en un texto que se incluye al final de esta edición.
Sin embargo fué escrita cuando su autor estaba en su mejor momento y está considerada como su mejor novela. La escribió en dos meses, casi de corrido, lo que dota al texto de una espontaneidad y frescura muy notables. Según iba avanzando, Stendhal iba añadiendo nuevos personajes, introduciendo amoríos, enredos y vicisitudes en la trama, lo que finalmente simula bastante bien la vida real, en la que los acontecimientos se suceden a veces sin orden ni concierto y lo más sorprendente puede llegar a ocurrir.
Los personajes están dibujados con una profundidad psicológica enorme, de manera que después de haber leído unas páginas sobre ellos parece que les conocemos. Las descripciones de los paisajes son fenomenales, se nota que el autor le tenía mucho cariño a Italia y el texto tiene una fuerza y sentido, de manera que da la sensación de ser una historia real. A principio del libro se dice que el autor escuchó en una fiesta contar la hisroria de los amores de la duquesa Sanseverina, dama influyente de la corte de Parma, y le pareció tan interesante que decidió escribir un libro sobre ella.
Hay amoríos, batallas, peripecias mil, intrigas palaciegas, enamoramientos súbitos, ambición, celos... todo un catálogo de lo que se puede encontrar en una novela romántica típica, una historia de pasión y sentimientos encontrados, escrita con maestría y una habilidad singular. El resultado es un libro formidable que se disfruta página a página, un clásico que está en todos los canones de lo que se debe leer. Muy recomendable. Una joya.
En este enlace podéis encontrar el texto completo en formato pdf, publicado en la Biblioteca digital del Ministerio de Educación y Cultura de Uruguay.
Editorial: Alianza
Precio: 14,90 euros
Año de edición: 2004
La historia del joven Fabricio del Dongo, prototipo del carácter romántico que admira a Napoleón, llega a estar en la batalla de Waterloo y trata de hacer carrera dentro de la Iglesia, no tuvo muy buena acogida cuando se publicó, en 1839, y sólo recibió los elogios de Honoré de Balzac, en un texto que se incluye al final de esta edición.
Sin embargo fué escrita cuando su autor estaba en su mejor momento y está considerada como su mejor novela. La escribió en dos meses, casi de corrido, lo que dota al texto de una espontaneidad y frescura muy notables. Según iba avanzando, Stendhal iba añadiendo nuevos personajes, introduciendo amoríos, enredos y vicisitudes en la trama, lo que finalmente simula bastante bien la vida real, en la que los acontecimientos se suceden a veces sin orden ni concierto y lo más sorprendente puede llegar a ocurrir.
Los personajes están dibujados con una profundidad psicológica enorme, de manera que después de haber leído unas páginas sobre ellos parece que les conocemos. Las descripciones de los paisajes son fenomenales, se nota que el autor le tenía mucho cariño a Italia y el texto tiene una fuerza y sentido, de manera que da la sensación de ser una historia real. A principio del libro se dice que el autor escuchó en una fiesta contar la hisroria de los amores de la duquesa Sanseverina, dama influyente de la corte de Parma, y le pareció tan interesante que decidió escribir un libro sobre ella.
Hay amoríos, batallas, peripecias mil, intrigas palaciegas, enamoramientos súbitos, ambición, celos... todo un catálogo de lo que se puede encontrar en una novela romántica típica, una historia de pasión y sentimientos encontrados, escrita con maestría y una habilidad singular. El resultado es un libro formidable que se disfruta página a página, un clásico que está en todos los canones de lo que se debe leer. Muy recomendable. Una joya.
Portada de la edición francesa de 1846
Ya le hemos dedicado una extensa nota biográfica a Henri Bayle (Grenoble, 1783-1842), más conocido como Stendhal. Para no repetirnos solo recordaremos que es uno de los grandes autores de la novela realista del siglo XIX, que decía que la novela debía ser como un espejo que refleja todo lo que pasa mientras alguien lo lleva por un camino y que escribía un francés maravilloso, objetivo claro y escueto. Para entrar en situación solía leer varias páginas del código civil francés antes de sentarse a redactar.
Es conocido también por haberse sentido enfermo al ver juntas en Florencia tantas obras de arte bellas y famosas; era lo que se conoce como síndrome de Stendhal. Para acabar, es uno de los novelistas de referencia para todo buen devorador de libros. Stendhal es algo my serio.
Es conocido también por haberse sentido enfermo al ver juntas en Florencia tantas obras de arte bellas y famosas; era lo que se conoce como síndrome de Stendhal. Para acabar, es uno de los novelistas de referencia para todo buen devorador de libros. Stendhal es algo my serio.
Stendhal, cuadro de Pierre-Joseph Dedreux-Dorcy
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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