Título: La dama zorro
Autor: David Garnett
Editorial: Lumen
Precio: 12 euros
Año de edición: 1987
Esta novelita, interesante y original como pocas, publicada nada menos que en 1922, hace más de noventa años, resulta asombrosamente moderna, innovadora, refrescante y divertida. Escrita en clave de fábula, con un cierto toque de ironía, plantea el desarrollo sensato y realista de un hecho inicial fantasioso y disparatado: la transformación de una dama inglesa en zorro.
Tan singular planteamiento le permite dos cosas al autor: por un lado, ironizar y criticar el maltrato animal y en concreto un enfrentamiento tan desequilibrado como la tradicional caza del zorro y, por otro lado, tratar alegóricamente temas de un calado anorme, como el amor, el dolor, la amistad, la lealtad, la fidelidad, el compromiso... Garnett da un paseo alegórico y revelador sobre esos asuntos simplemente narrando el desarrollo de una relación sentimental en la que una de las partes es una zorrita, y la otra, todo contención y circunspección, se mantiene enamorado y trata de mantener la situación lo mejor que puede.
La moraleja podría ser que el amor y la fidelidad pueden con todo cuando son sinceras y profundas, pero hay muchas otros matices y la historia es mucho más compleja que lo que puede sugerir una conclusión tan simple. Una fábula deliciosa y aguda, que mueve a la reflexión, un relato con un trasfondo tremendo, que hay que leer con pies de plomo para que no se escape ningún detalle de todo lo que se insinúa. Un clásico que ha envejecido muy bien. Una novela mágica que me ha encantado y recomendaría a todo el mundo.
Esta edición se completa con otra novelita del mismo autor, «Un hombre en el zoo», que en realidad me ha gustado más aún que «La dama zorro». Escrita dos años más tarde, en 1924, es otro relato alegórico, basado en la historia de un hombre que se ofrece para ser exhibido como un ejemplar más en un zoológico. Una situación tan fuera de lo normal permite ironizar sobre las relaciones de noviazgo inmaduras con una eficacia demoledora. Una lectura que vale la pena y proporciona placeres impagables. Para mí ha supuesto una experiencia muy especial, porque algunos pasajes me han recordado ciertos pasajes de mi propia vida. Genial.
«La dama zorro», que ha inspirado versiones para teatro y un ballet, alcanzó un éxito enorme nada más publicarse, consiguió los premios James Tait Black Memorial y Hawthornden, y le reportó otras satisfacciones añadidas a su autor. Un año después de su aparición, se casó con la ilustradora del libro, Rachel Alice Marshall.
Cubierta de la edición original de 1924
David Garnett (Brighton, 1892-1981), hijo único del escritor Edward Garnett y su mujer Constance, una traductora del ruso, es uno de los autores británicos más curiosos y atípicos. Fué miembro del Círculo de Bloomsbury, bisexual y objetor de conciencia durante la Primera Guerra Mundial; se pasó el tiempo que duró el conflicto trabajando en plantaciones de frutas con su amante, el pintor Duncan Grant.
Fué muy prolífico, escribió más de cuarenta novelas originales, alegóricas, brillantes, llenas de creatividad y deslumbrantes. Garnett no se parece a ningún otro escritor y no encaja en las clasificaciones al uso. Es un autor muy interesante y poco editado y leído en España.
Cuando era niño, tenía un abrigo de piel de conejo con el que estaba tan gracioso que empezaron a llamarle bunny y el apodo le acompañó durante toda su vida. Así que esta puede ser la historia de un niño que se convirtió en conejo y escribió sobre una dama que se convirtió en zorro.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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