viernes, 25 de mayo de 2012

Escuela de mandarines - Miguel Espinosa


Título: Escuela de mandarines
Autor: Miguel Espinosa

Páginas: 600

Editorial: Alfaguara

Precio: 28,60 euros 

Año de Edición: 2006

No es una novela fácil de leer, pero si el sufrido lector invierte paciencia y concentración, se verá recompensado con una obra única, extraña y original donde las haya. Una utopía disparatada e irónica, en el país de la Feliz Gobernación, ahogado por una burocracia demencial, dividida en seis castas, la primera de las cuales es la de los mandarines (los que mandan) y la más baja la de los becarios, estómagos agradecidos y personajes untuosos que se dedican fundamentalmente a zampar sopas, gallinas y avestruces, esperando medrar.

No cuesta mucho ver una crítica, surrealista y desmadrada, de la universidad española durante el franquismo, llena de símbolos y metáforas, divertida y enloquecida. Llama la atención el lenguaje riquísimo, culto, erudito, lleno de expresiones antiguas, con un vocabulario amplísimo. Espinosa empleó veinte años, desde 1954 hasta 1974 en escribir esta novela de culto y parece ser que tuvo que visitar un montón de editoriales con su original debajo del brazo hasta que alguien le gustó lo bastante como para editarlo.

Yo la leí hace tiempo, en vacaciones, con todo el tiempo del mundo. Al principio la sensación de extrañeza era muy fuerte, pero cuando uno se acostumbra a esa manera de escribir, con repeticiones, largos discursos, notas y referencias eruditas, se empieza a leer muy deprisa y al final, hasta sabe a poco y todo. Ahora he vuelto a coger el libro, lo he ojeado, he leído unas cuantas páginas, aquí y allá, y es la bomba.

Aquí podéis una crítica muy completita de La Tormenta en un vaso.

Miguel Espinosa (Caravaca de la Cruz, 1926-1982), abogado de profesión, novelista y ensayista, nació en el pueblo murciano de Caravaca, centro de peregrinación. Siendo muy niño su familia se trasladó a Murcia, ciudad en la que ya viviría toda su vida y a la que estaba muy unido. Pasaba incontables horas en el café Santos, escribiendo. Estando casado, allí conoció a su musa, Mercedes Rodríguez, protagonista de varias de sus obras. 

En 1957 se dió a conocer con un ensayo titulado «Reflexiones sobre Norteamérica» que suscitó el entusiasmo de  personajes tan dispares como Tierno Galván y Manuel Fraga. Escritor insólito, original, casi secreto, autor de culto, poco conocido por el gran público y muy apreciado por la crítica, sólo publicó dos novelas en vida. El resto de sus libros han resultado póstumos. Murió de repente. Miguel Espinosa pasó como un aerolito de otra galaxia a través del panorama literario español, raro, excéntrico, sin influencias claras y casi sin dejar rastro.

Miguel Espinosa

Publicado por Antonio F. Rodríguez.

No hay comentarios:

Publicar un comentario