Título: Tres rosas amarillas
Autor: Raymond Carver
Páginas: 160
Editorial: Anagrama
Precio: 7,90 euros
Año de edición: 1997
Este libro de cuentos, publicado en EE. UU. en 1988, que tardó nada menos que nueve años en ser traducido y publicado en España, recoge siete cuentos, siete obras de arte del nivel habitual que tienen los textos de Carver. Secos, duros, sencillos hasta el extremo. Textos desnudos y minimalistas que muestran los ribetes más desoladores de la realidad.
Parejas rotas, perdedores, solitarios, marginados, enfermos, exparejas... pasan por estos cuentos, en parte biográficos, basados todos ellos en retazos de la vida del propio autor. Muestran secuencias de vida cotidiana en la llamada América profunda, existencias grises y anodinas, sin estímulos ni intereses, deprimidas. Y sin embargo, estos cuentos tienen una belleza innegable, una hermosura poética que conmueve desde su sencillez y crudeza.
Este americano es un cuentista de primera y aquí encontramos «Tres rosas amarillas», un cuento realmente extraño por el tema que trata, los últimos días de Chéjov, y verdaderamente magistral. Un relato genial que en este enlace podéis leer en línea.
Un libro muy, muy recomendable,como todo Carver. Nunca me canso de volver a leer los testos de este genial estadounidense. Un monstruo.
Raymond Carver (Clatskanie, Oregón, 1938-1988) fué un escritor estadounidense, inscrito en el minimalismo y en el realismo sucio, dos de las tendencias más importantes del siglo XX. Está considerado como un gran cuentista, comparable a los clásicos más conspicuos.
Este libro de cuentos, publicado en EE. UU. en 1988, que tardó nada menos que nueve años en ser traducido y publicado en España, recoge siete cuentos, siete obras de arte del nivel habitual que tienen los textos de Carver. Secos, duros, sencillos hasta el extremo. Textos desnudos y minimalistas que muestran los ribetes más desoladores de la realidad.
Parejas rotas, perdedores, solitarios, marginados, enfermos, exparejas... pasan por estos cuentos, en parte biográficos, basados todos ellos en retazos de la vida del propio autor. Muestran secuencias de vida cotidiana en la llamada América profunda, existencias grises y anodinas, sin estímulos ni intereses, deprimidas. Y sin embargo, estos cuentos tienen una belleza innegable, una hermosura poética que conmueve desde su sencillez y crudeza.
Este americano es un cuentista de primera y aquí encontramos «Tres rosas amarillas», un cuento realmente extraño por el tema que trata, los últimos días de Chéjov, y verdaderamente magistral. Un relato genial que en este enlace podéis leer en línea.
Un libro muy, muy recomendable,como todo Carver. Nunca me canso de volver a leer los testos de este genial estadounidense. Un monstruo.
Raymond Carver (Clatskanie, Oregón, 1938-1988) fué un escritor estadounidense, inscrito en el minimalismo y en el realismo sucio, dos de las tendencias más importantes del siglo XX. Está considerado como un gran cuentista, comparable a los clásicos más conspicuos.
HIjo de una camarera, se formó bajo la tutela del escritor John Gardner, estudio en el Chico State College, en Chico (California) y publicó una larga lista de relatos en las revistas estadounidenses más prestigiosas sobre gente de la clase baja, parados y marginados de todo tipo.
El editor de la revista Squire, Gordon Lish influyó mucho en su estilo y le ayudo a poderlo de todo lo innecesario. Allí donde John Gardner le recomendaba usar solo 15 palabras en lugar de 25 palabras, Lish le decía que no podía pasar de 5.
Carver murió de los 50 años de un cáncer de pulmón.
Raymond Carver
Publicado por Antonio F. Rodriguez.
Este libro me gustó mucho y me permitió conocer a su autor del cual no había leído nada antes. Me gustan tus comentarios, no solo de este libro sino de otros muchos, gracias por ellos. Un abrazo, Pilar
ResponderEliminarGracias, Pilar, por tu comentario. A mí me ocurrió una cosa curiosa con Carver. Cuando estaba de moda y mucha gente hablaba de él, no lo leí, lo que oía sobre el "realismo sucio" no me atraía. Pero tiempo después leí "Catedral" y me fascinó, me descubrió todo un mundo más allá de las palabras.
ResponderEliminarSalud y libros.
Sinceramente, no tengo nada claro que Carver pertenezca al realismo sucio. Un gran escritor, por cierto. Y muy curiosa la influencia de Lish en lo que concierne a su particular estilo. Lo compararía con Chejov.
ResponderEliminar