Título: El guardián invisible
Autora: Dolores Redondo
Páginas: 440
Editorial: Destino
Precio: 18,50
Año de Edición: 2013
Páginas: 440
Editorial: Destino
Precio: 18,50
Año de Edición: 2013
Se
trata de una novela negra desarrollada en el ámbito rural del valle del Baztán.
La inspectora Amaia Salazar, una policía foral joven que ha completado su
formación en EE. UU., regresa a su pueblo natal, Elizondo, para desentrañar
unos crímenes aparentemente cometidos por un asesino en serie. Si bien es su estreno
en la dirección de grupos, está preparada de sobra para organizar a sus hombres
y explotar las últimas tecnologías encaminadas a producir avances en la
investigación.
En
su vida personal, arrastra un maremágnum sentimental, agravado por un
matrimonio que, siendo feliz, pasa dificultades para conseguir descendencia. Además,
se conjetura que ha sufrido una infancia difícil, pues la relación con sus
hermanas está cargada de reproches por experiencias del pasado mal resueltas,
lo que provoca en la protagonista pasiones que le enturbian el intelecto y le
dificultan la claridad de ideas, tan necesaria para el buen desarrollo de
su trabajo.
Los
asesinatos sacuden a una población en la que todos los vecinos se conocen entre
sí. El afán de esclarecimiento de la verdad va desvelando tramas laterales en las que los personajes arrostran sus vicisitudes con arreglo a su propia
personalidad. El conjunto acaba conteniendo tal variedad de caracteres que se
convierte en un bosquejo de la sociedad vasco-navarra donde el matriarcado es
ley.
El
ambiente pirenaico impregna toda la acción que transcurre en un pueblo adosado
a un río, que lo nutre pero también lo amenaza con inundaciones, en medio de
bosques cargados de leyendas mágicas y seres mitológicos con nombres tan
cándidos como «basajaun», aunque de aspecto tan temible como un oso. Esa atmósfera
propicia escenas donde tienen cabida, sin chirriar, desde lo onírico hasta lo
paranormal.
La
narración, que es ágil y consigue atenazar al lector, se va diseminando en
varios frentes, a cuál más interesante, exhibiendo una panoplia de sucesos que
mantienen en vilo al espectador. El desenlace final resuelve los enigmas
planteados, pero deja algunos cabos sueltos que señalan el camino por donde seguirán
los hechos en la segunda parte.
Porque «El guardián invisible» es el primer libro de una prometedora «Trilogía del
Baztán» donde tanto los acontecimientos como el entorno y los personajes que
aparecen están preñados de luces y sombras. Éstos últimos, casi sin
excepción, muestran rasgos buenos y malos, lo cual les convierte
automáticamente en sospechosos. Y, paradójicamente, los hace más verosímiles,
porque ninguna peripecia vital puede ser creíble si está exenta de claroscuros.
Esta
obra se me antoja el negativo fotográfico de los casos resueltos por el ilustre
guardia municipal de Tomelloso, Plinio, escritos por Francisco García Pavón
hace 40 años, que suceden en la soleada llanura manchega y muestran la
idiosincrasia rural castellana, tan diferente de la vasca. Recomiendo vivamente
las dos lecturas porque ambas, desde territorios geográficos y tradiciones muy
distintas, ponen de relieve que las cicatrices que atraviesan el alma humana
son iguales en todas partes.
Dolores Redondo
Dolores Redondo (San Sebastián, 1969) ha sacado su segunda novela en las cuatro lenguas
oficiales del Estado español y tiene prevista la publicación en otra docena más
de idiomas. Por si fuera poco, los productores de «Millennium» y de las obras de Henning Mankell han comprado los
derechos de adaptación a la gran pantalla. Incluso existen peregrinaciones a
Elizondo, organizadas para reconocer in situ los lugares por los que discurre
la ficción y probar algún que otro postre de gran relevancia en la novela. Toda esta
suma de alardes demuestra la gran expectación generada alrededor de esta creación
literaria.
La
segunda parte de la trilogía «Legado en los huesos» será publicada a final de
año y la tercera «Ofrenda a la tormenta» ya está pergeñada. Estupendas noticias
para todos los que, como el cantante Jorge Drexler, «amamos la trama más que el
desenlace».
Una última sugerencia: No perder la pista de la autora ni tampoco la de su personaje de ficción, la inspectora Salazar. Quizá, en el futuro, ese apellido pueda traernos tan buenos momentos como los disfrutados con Carvalho, Bevilacqua, Montalbano, Jaritos o Wallander.
Una última sugerencia: No perder la pista de la autora ni tampoco la de su personaje de ficción, la inspectora Salazar. Quizá, en el futuro, ese apellido pueda traernos tan buenos momentos como los disfrutados con Carvalho, Bevilacqua, Montalbano, Jaritos o Wallander.
Está teniendo muy buenas críticas este libro. Una amiga lo está leyendo en este momento y además de que también le está gustando está que se muerde las uñas por contar cosas y hablar de él, pero claro como no lo he leído aún...
ResponderEliminarTendré que ponerme al día.
Un saludo!
Hola, Ana:
ResponderEliminarSí, yo oí hablar por la radio a la autora y me pareció que tenía un planteamiento muy atractivo. Creo que este libro va a estar muy bien; Adolfo es un buen lector, lleva muchos años leyendo y creo que tiene buen criterio.
Salud y libros.
Antonio