miércoles, 19 de junio de 2013

La sonrisa etrusca - José Luis Sampedro


Título: La sonrisa etrusca 
Autor: José Luis Sampedro 

Páginas: 336 

Editorial: Debolsillo 

Precio: 7,95 euros 

Año de edición: 2008

Esta estupenda novela, aparecida en 1985, es probablemente la más vendida de las novelas de José Luis Sampedro y una de las mejores que escribió. La versión superventas de su literatura.

Cuenta una historia cotidiana de un abuelo que fué partisano en su juventud, del choque de su cultura rural y algo anticuada con la de una ciudad moderna, de su relación con su nieto y su vitalidad, de lo difíciles que son a veces las relaciones humanas y también de todo lo que un viejo puede aprender de un niño que todavía no habla. Los personajes y las situaciones son tan reales, de una naturalidad tan exagerada, que es fácil reconocer personas cercanas, peripecias que se repiten en otros lugares. Tengo un amigo que encontró más de diez coincidencias entre la historia del protagonista y la de su padre.

El personaje central está muy bien construido y mantiene toda la novela. Profundamente humano, con sus defectos, sus manías, su mal genio y también su capacidad de sentir cariño y emocionarse intacta. Un tipo inolvidable y entrañable que me parece que tiene algunos toques del propio Sampedro, que disfrutó mucho de su nieto y todos los días merendaba con él.

El título, «La sonrisa etrusca», alude a la enigmática y agradable sonrisa que adornaba las estatuas etruscas antes de que llegase el solemne y serio arte griego, tan importante que todas las figuras parecen notarios o banqueros. Esa sonrisa juega un papel clave en la novela y aparece en el desenlace. Uno de los mejores ejemplos de ese gesto es el que puede verse en el llamado «Sarcófago de los esposos», que se conserva en el Museo de Villa Giulia (Roma).

En él se puede a una pareja, amososamente recostada, que parece estar dirigiéndose al espectador por la actitud de sus manos y esboza una espléndida sonrisilla de felicidad. Tengo entendido que la religión estrusca era muy positiva, pintaba el otro mundo como un paraíso lleno de felicidad para todos y por eso las representaciones funerarias parecían tan felices.
 
El sarcófago de los esposos (520 A. C.). Foto CC-BY Gebruiker:GerardM

En cualquier caso, es una espléndida novela, deliciosa, que se lee con facilidad, llena de ternura y que cuenta historias humanas típicas, que se repiten en muchas latitudes y países,  por eso nos toca tan de cerca. Si no la habéis leído, ponedle remedio, os lo pasaréis muy bien. 

José Luis Sampedro Sáez (Barcelona, 1917-2013) fué un economista y escritor español que destacó en ambas actividades por su extraordinario talento. Al año de nacer, su familia se trasladó a Tánger (Marruecos), donde vivió hasta los trece años. Fué movilizado por el ejército republicano en la Guerra Civil Española, combatió en un batallón anarquista y pasó la guerra en Cataluña, Guadalajara y Huete (Cuenca).

Obtuvo una plaza de funcionario de aduanas en Santander, luego consiguió el tralado a Madrid e hizo la carrera de Ciencias Económicas mientras trabajaba, carrera que finalizó con  Premio Extraordinario. Comenzó a trabajar en el Banco Exterior de España y a dar clase en la Universidad Complutense de Madrid, donde con el paso de los años llegó a ser Catedrático de Estructura Económica. Escribió un estupendo libro titulado «Las fuerzas económicas de nuestro tiempo», en el que explicaba cómo se repartía el poder económico en el mundo. Por aquellos años ya escribía novelas. 
  
En 1965 y ante la expulsión de la Universidad de varios notables catedráticos (Aranguren, Tierno Galván, García Calvo) perpetrada por el franquismo, decidió hacerse profesor visitante en las Universidades de Salford y Liverpol. El éxito literario le llegó ya jubilado, recibió multitud de galardones y premios, fué senador, académico de la lengua desde1990 y en 2011 obtuvo el Premio Nacional de las Letras. Desgraciadamente nos dejó el pasado mes de abril.
  
Sampedro es uno de mis escritores favoritos, comprometido, sabio, lúcido, inteligente y humano, muy humano. Un viejo profesor al que vale la pena visitar de vez en cuando por medio de sus libros, porque nos ayuda a ser mejores personas.

 
José Luis Sampedro

 Publicado por Antonio F. Rodríguez.

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