Título: La tristeza del samurái Autor: Víctor del Árbol
Páginas: 420 pág.
Editorial: Alrevés
Precio: 20 euros
Año de edición: 2021
Puedo escribir un poco sobre cómo nos presenta su autor «La tristeza del samurái» pero, con decir que es un thriller, un futuro lector ya va a saber muy bien lo que se va a encontrar. Eso sí, no todos los thrillers son iguales y elegir uno escrito por Víctor del Árbol (Barcelona, 1968) es siempre un acierto.
La acción se ambienta en dos épocas bien definidas —aunque hay algún periodo intermedio en el que sucede algún pasaje—, una ellas la postguerra y la otra, los años previos al intento de golpe de estado del 23F. En ambas tenemos a un buen elenco de personajes que, aunque ellos no lo sepan, tienen bastante en común. Sobre todo, respecto a un matrimonio mal avenido en los años cuarenta con el que, en mayor o menor medida, todos tienen relación. Ellos son Isabel y Guillermo Mola, una mujer un tanto libertina y no solo para su generación sino para cualquiera, y un hombre falangista y demasiado autoritario para cualquier generación.
Este libro es una novela de pasiones humanas, como el amor o el odio; es también una novela donde encontraremos a María, una abogada que demostrará una gran profesionalidad, y también es la novela de unos personajes tan indeseables como políticos oportunistas y degenerados, que actuarán a su antojo o a la sombra de los mencionados oportunistas. Pero si algo tiene también esta obra es el reflejo de los dos momentos citados, con todos sus condicionantes históricos. Me ha gustado ver a una España que respiraba el aroma de la victoria y también a esa otra España que inspiraba una nueva libertad sin haberse quitado de encima aún a todos los fantasmas del pasado. Sin duda, dos momentos muy entrañables.
Víctor del Árbol es actualmente un exitoso escritor, que durante veinte años ejerció de mozo de escuadra (1992-2012), y fue precisamente en el tramo final de su vida como miembro del cuerpo de seguridad cuando empezó a despuntar como escritor, con logros tan importantes como el Premio Tiflos de 2006 por su novela «El peso de los muertos», y distinciones tan señaladas como ser finalista en premios como el Fernando Lara de 2008 y el Nadal de 2010 —galardón que logró dedicándose ya profesionalmente a la escritura en 2016—. «La tristeza del samurái», publicado en 2011, fue en su momento un fenómeno literario, tanto es así que hace poco ha merecido que su editorial, Alrevés, le dedique una edición especial conmemorativa por su décimo aniversario.
Publicado por Jesús Rojas.
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