Título: Un millón de muertos
Autor: José María Gironella
Páginas: 800
Editorial: Planeta
Año de edición: 2005
El demoledor final de «Los cipreses creen en Dios» sirve de punto de arranque para la primera página de «Un millón de
muertos», emotiva segunda parte de la tetralogía que le dedico José Mª Gironella (Darnius, 1917 – Arenys de Mar, 2003) a la Guerra Civil Española.
La guerra, que en el primer tomo de la serie se desarrollaba en el contexto de la gerundense
familia Alvear, queda reducida aquí al atronador silencio sepulcral de la retaguardia de
una pequeña capital de provincia. Por ello, Gironella, sin olvidar a los
integrantes que protagonizaron «Los cipreses creen en Dios», tendrá que abrir
horizontes hacía los grandes focos de actividad, como los frentes de guerra o las
importantes ciudades de Madrid y Barcelona, además de recurrir a personajes
ficticios y reales que reaparecerán, o aparecerán por primera vez, con gran peso
en el transcurso de la novela.
Entre esos personajes secundarios
que reaparecerán cobrando una relevancia especial, se encuentra el policía
Julio García. El agente en esta segunda entrega encarnará un personaje que de qué
manera recordará al que de sí mismo hizo el escritor Arturo Barea en su
trilogía autobiográfica. En el entorno de la familia Alvear, sorprenderá el
progresivo aumento del protagonismo de Ignacio Alvear; que tuvo que convertirse
en hombre tal vez demasiado pronto invadido por un odio justificado (si es que
tal sentimiento tiene justificación).
Por otro lado, ya en el mundo de
los personajes reales, son muchas las personalidades históricas que se citan, como el malogrado líder anarquista Buenaventura Durruti y
el brigadista André Marty.
La vorágine política predominante
en los años de la República, a partir de 1936, queda extinta y agrupada en dos
facciones bien diferenciadas. «Un millón de muertos» es un excelente reflejo de
los acontecimientos que dan pie a ese camino que tomó la sociedad española hacia una
polarización ideológica. Unido a eso, la abundancia de datos históricos en la
obra completa, sobre todo en este segundo tomo que relata el episodio sin
duda más importante, hace de esta tetralogía una obra literaria imprescindible
para todo aficionado a la historia reciente de nuestro país.
José María Gironella
(Foto El Periódico de Aragón)
Publicado por Jesús Rojas.
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