Editorial: Plaza y Janés
Precio: 19,90 euros
Año de edición: 2023
Estamos en el mes de abril de 1952, en la Barcelona gris, dura, pobre y aburrida, marcada por la dictadura y la posguerra. A la oficina de un investigador privado llega una joven que quiere casarse y desea saber si su marido está realmente muerto. Desapareció durante la guerra y todos le suponen fallecido, pero ella quiere asegurarse, tener la certeza, no sea que esté escondido o exiliado y de pronto se presente. Hay que buscar a un miliciano en paradero desconocido hace más de trece años.
Ése es el punto de arranque de esta estupenda novela negra, ágil y entretenida como pocas, realista y creíble, muy amena y bien escrita, que se lee a velocidad de crucero, cuesta abajo, con buenos diálogos, personajes bien dibujados, unas cuantas sorpresas y un desenlace inesperado. Otro caso del detective Miquel Mascarell, un hombre derrotado y algo amargado, al que le cuesta esfuerzo disfrutar de lo que tiene, trabajo y una mujer que le quiere. También avispado y con experiencia, con la cabeza mejor amueblada que su jefe, el dueño de la agencia, David Fortuny, un franquista con el que forma una peculiar pareja, siempre picándole y medio discutiendo, de broma, pero discutiendo.
No faltan la ironía ni el sentido del humor, hasta el punto de que la novela termina con una risotada. Un texto con un ritmo muy vivo, que nos cuenta el desarrollo del caso durante siete días del mes de abril y de fondo, nos ofrece todo un fresco de aquella época, con una galería de personajes muy creíbles, lleno de detalles reveladores y descripciones atinadas, hasta casi ser una novela costumbrista. Eran tiempos oscuros en los que las investigaciones de los detectives eran especialmente difíciles porque todo el mundo quería olvidar, ocultar el pasado y nadie estaba dispuesto a habar. Días en los que la población se dividía en adictos al régimen, dudosos y desafectos. Años en los que «Ya nadie tiene 20 años... no siquiera los que tienen 20» y «Los muertos gritan a veces más que los vivos».
Hay un buen número de frases tan memorables como estas: «A un hombre se le empieza a conocer por los zapatos», «La felicidad es un pájaro que vuela muy rápido», «Cada uno de nosotros que sobreviva será una derrota para ello».
En fin, una novela negra de cinco estrellas, redonda y muy conseguida, que hará las delicias de todos los aficionados al género. Otra demostración del genio de este prolífico y habilidoso autor, que confiesa haberla escrito en 27 días de trabajo, Muy buena. Con decir que, incluso, hay párrafos y giros que recuerdan lejanamente a Camilleri. Con eso está dicho todo.
Jordi Sierrra i Fabra (Barcelona, 1947) es un escritor español muy prolífico, que ha publicado 500 títulos de literatura juvenil, biografía, ensayo y novela para adultos, con gran éxito y buenas cifras de ventas. Ha obtenido innumerables premios, entre otros el Premio Cervantes chico y el Premio Nacional de Literatura Infantil y Juvenil.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario