Título: Vigilia inquieta
Autor: António Patrício
Páginas: 144
Precio: 16 euros
Año de edición: 2014
Este delicioso librito está todavía caliente, recién salido de la imprenta y ha sido un verdadero descubrimiento, no os lo perdáis, es impresionante. Publicado en 1910, contiene cinco cuentos de este autor portugués del que, la verdad, nunca había oído hablar y me parece que es prácticamente desconocido en España. En el catálogo de la Biblioteca Nacional sólo se encuentran un tomo de poesías de 1942 y una edición de este libro de 1920.
¡Imperdonable olvido! Menos mal que la editorial Ardicia ha venido a repararlo. António Patrício nos deja aquí la historia de cinco personajes peculiares y extraños donde los haya, un vagabundo poco convencional, un águila de zoológico, un niño enfermo, un amante de las fuentes y una refinada y deliciosa cocotte. Cinco retratos prodigiosos, profundos, llenos de fuerza, de otros tantos personajes atormentados, complejos y rodeados de un halo de misterio, de un último enigma que no se llega a aprehender del todo.
Mi favorito es el último, «Suze», el que describe a una coqueta absolutamente deliciosa y elegante, de vuelta de todo, un personaje de papel con tanta vida que es inevitable pensar que el autor la conoció personalmente.
El estilo es elaborado sin ser preciosista, de calidad y poderoso; en cada cuento el autor toma las riendas con decisión y lleva a la imaginación del lector por donde desea con mano decidida. El lenguaje resulta moderno, actual, capaz de evocar atmósferas. ambientes y peripecias humanas con facilidad. Todo el texto está impregnado de un sabio nihilismo, del suave desencanto de quien ha vivido mucho y visto mucho.
El estilo es elaborado sin ser preciosista, de calidad y poderoso; en cada cuento el autor toma las riendas con decisión y lleva a la imaginación del lector por donde desea con mano decidida. El lenguaje resulta moderno, actual, capaz de evocar atmósferas. ambientes y peripecias humanas con facilidad. Todo el texto está impregnado de un sabio nihilismo, del suave desencanto de quien ha vivido mucho y visto mucho.
Un libro muy recomendable para los amantes de la buena literatura, de un autor que merece ser más conocido y disfrutado, original y con mucha personalidad, que otro poeta describió como un «aristócrata nietzscheano».
António Patrício (Oporto, 1878-1930) era hijo de una criada y del dueño de una funeraria. Estudió Medicina y se dedicó a la política, fué nombrado cónsul en A Coruña e inició una brillante carrera diplomática que le llevó a Manaos, Bremen, Atenas, Estambul, Londres, Caracas y Macao.
António Patrício (Oporto, 1878-1930) era hijo de una criada y del dueño de una funeraria. Estudió Medicina y se dedicó a la política, fué nombrado cónsul en A Coruña e inició una brillante carrera diplomática que le llevó a Manaos, Bremen, Atenas, Estambul, Londres, Caracas y Macao.
Al mismo tiempo desarrolló una carrera literaria muy interesante. Fué un poeta admirado, elogiado por autores de la talla de Fernando Pessoa o Amado Nervo, que practicó el simbolismo y el decadentismo, un sólido autor de teatro y publicó también este volumen de relatos, sólo éste, ¡qué pena!.
António Patrício
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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