Título: Homo videns. La sociedad teledirigida
Autor: Giovanni Sartori
Páginas: 159
Editorial: Taurus
Precio: 14,65 euros
Año de edición: 1998
Me han recomendado este libro antiguo, de hace ya trece años, lo que en el ciberespacio es una eternidad, que trata con agilidad y clarividencia los efectos negativos que, primero la Televisión y luego Internet, causan en el ser humano, en cuanto homo sapiens que cada vez piensa menos por sí mismo y se va convirtiendo en homo vIdens, en animal contemplativo y pasivo, con poco espíritu crítico y escasa capacidad de abstracción.
Me lo he leído prácticamente en una tarde. Es un libro escrito de manera sencilla, directa y clara, sin adornos. Nos habla del tele-ver, del vídeo-vivir, de la Televisión como herramienta antropogenética, que crea una realidad humana diferente, de la opinión tele-dirigida y la vídeo-política, del principio non vidi, ergo non est (si no se ve, es que no existe) y otras muchas cosas.
Me lo he leído prácticamente en una tarde. Es un libro escrito de manera sencilla, directa y clara, sin adornos. Nos habla del tele-ver, del vídeo-vivir, de la Televisión como herramienta antropogenética, que crea una realidad humana diferente, de la opinión tele-dirigida y la vídeo-política, del principio non vidi, ergo non est (si no se ve, es que no existe) y otras muchas cosas.
Giovanni Sartori (Florencia 1924) es un prestigioso investigador en el campo de la Ciencia Política, profesor en las Universidades de Florencia, Stanford y Columbia. Ha sido nombrado doctor honoris causa por varias universidades y en 2005 le fué concedido el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales.
Un libro muy interesante, que nos hace reflexionar sobre el efecto de la multimedia en la cultura, y los tiempos que nos ha tocado vivir, en los que la TV adormece y uniforma a la población, no la deja crecer, y produce grandes cantidades de subinformación (información insuficiente) y desinformación (información falseada, voluntaria o involuntariamente). Sin llegar a ser demasiado apocalíptico, este libro nos advierte con lucidez de riesgos y peligros que nos acechan agazapados tras el circo audiovisual que nos rodea. A pesar de todo, siempre nos quedarán los libros. Larga vida a Gutenberg.
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