Título: Etimologías para sobrevivir al caos Autora: Andrea Marcolongo
Páginas: 336
Editorial: Taurus
Precio: 18,90 euros
Año de edición: 2021
Siempre me ha fascinado la etimología de las palabras, esa búsqueda de su esencia más pura y profunda, ese ahondar hasta llegar a la raíz de la que nace un significado. Pocas cosas nos hacen sentir más sabios que desvelar el misterio del origen de un término. No en vano, Sigmund Freud iniciaba muchos de sus escritos analizando la etimología de la palabra clave en cada caso, como si la parte oculta de la semántica de una voz nos pusiese en contacto inmediatamente con el inconsciente. Y atendiendo a las etimologías, José Antonio Marina decía que el lenguaje es una enciclopedia plegada de conocimiento. Basten dos ejemplos clásicos para darse cuenta de ello: «cantimplora» viene del catalán «canta i plora», porque al abrirla e inclinarla, sale líquido y el ruido parece una canción; los jabalíes gustan de revolcarse en el barro y al ver las huellas de esa actividad que han dejado en el cieno, los cazadores «barruntan» que ha pasado por allí el animal.
La helenista Andrea Marcolongo, ya conocida en este blog por otros títulos estupendos, nos ofrece aquí una joya de libro, una delicatessen para amantes del lenguaje en la que desgrana con profundidad erudita y detalles exhaustivos la etimología griega de 99 palabras, agrupadas en 9 capítulos según otras tantas familias de significados. Los términos y expresiones que sirven de columna vertebral a esta obra son: caos, vida, abandonar, pasión, melancolía, luz, espinas, simplicidad y las otras partes. Cada palabra sirve como estímulo disparador para que la autora divague siguiendo relaciones de significado y asociaciones de ideas según se le van ocurriendo. El resultado es un ensayo muy libre, erudito y enjundioso. Un destilado e cultura y sabiduría que encandila al lector y hace que las más de 300 páginas sepan a poco y se lean volando.
Marcolongo es una gran ensayista, llena de talento e inteligencia, y sabe presentar siempre sus disquisiciones con interés y amenidad. Su forma de escribir es correctísima, muy elegante y especialmente evocadora. Lo que en otra pluma podría ser un mamotreto de difícil digestión, en manos de esta mujer es un delicioso ensayo, que no hace más que deleitarnos. Por suerte, el español es una lengua romance y bastante próxima al italiano, por lo que se entiende perfectamente el contenido lingüístico y resulta cercano.
En fin, un libro muy recomendable, tanto para leer de corrido como para ser usado como libro de mesita de noche, y leer unos párrafos cada día antes de dormir. Un ensayo muy instructivo, que nos entretiene y nos hace pensar. No se puede pedir más. Una obra imprescindible, diría yo.
La obra incluye un íncipit (primeras palabras de un documento, que solían identificar al autor y su propósito al escribir el texto) al principio y un éxcipit (final, últimas palabras de un libro) al final, una selecta bibliografía y los consabidos agradecimientos. En este enlace se pueden leer las primeras páginas. La traducción a castellano del original en italiano ha sido realizada al alimón por Teófilo de Lozoya y Juan Rabasseda.
Ha vivido en París, Dakar, Sarajevo y Livorno. Lingüista, helenista, ha trabajado como redactora de textos para el político Matteo Renzi.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
No hay comentarios:
Publicar un comentario