martes, 5 de julio de 2022

Plaza del Castillo - Rafael García Serrano

 

Título: Plaza del Castillo                                                                                                    Autor: Rafael García Serrno

Páginas: 384 pág.

Editorial: Homo Legens

Precio: 8,90 euros

Año de edición: 2009

Hoy que falta solo un día para el chupinazo y dos días para el primer encierro de San Fermín, quiero hablaros de una novela muy pinturera, sanferminera y navarra. Se trata de una narración planeada en la línea de los mejores Episodios nacionales, un ejemplo de cómo contar unos acontecimientos históricos clave a través de un puñado de personajes y sus peripecias.

Es obra de un autor que tomó partido por los sublevados y cubre a capítulo por día las jornadas que van desde el 6 de julio de 1936 hasta el 19 de julio. Del chupinazo al bando del General Mola, que declaraba el estado de guerra en la ciudad. Son días convulsos, en los que algunos avisan a sus amigos, a veces en el bando contrario, de la que está preparando, Hay parejas que planean huir a Francia en coche, sacerdotes que aconsejan en el confesionario...

La gracia de la novela radica en que está escrita por un testigo de excepción, que vivió esos días terribles en primera persona y que se revela aquí como un gran escritor. Las descripciones de ambientes, costumbres y atmósferas, los diálogos, los personajes y sus afanes está estupendamente bien construidos. García Serrano levanta un impresionante fresco de la ciudad, dejando caer sus opiniones políticas de manera muy suave e indirecta.

Aquí aparece el autor camuflado en Julián, un guarda municipal en bici con la costumbre de contar las pedaladas, camareros con ese sueño mortal que les distingue del resto de los humanos, Menéndez, un periodista enamorado de Pamplona, Vallejo, que siente la sed insaciable de quien ha matado a un hombre, Áurea, que no sabe si es buena o mala e imita a Joan Crawford, la pensión de doña Cándida, el cura don Inocencio, Felisín, que sigue la costumbre de reñir con la novia en fiestas para andar por ahí libremente, León, el mejor vendedor ambulante, el moreno, un magistrado que espía las ventanas de la ciudad con prismáticos, el Hotel La Perla, la casa de citas del 35, los topolinos, los vermús, las tertulias, los toreros famosos, los carlistas, requetés, golpistas, fascistas, socialistas, comunistas...

Varios ecosistemas humanos que giran alrededor de la Plaza del Castillo, auténtico centro de la capital provinciana, que «latía como un enorme corazón, y la sangre del jolgorio inundaba las arterias de la ciudad».

El estilo es rico y jugoso, ligeramente alambicado, de frases cortas, con un ritmo muy alto y plagado de expresiones típicas y dichos del lugar. Sigue las historias de los personajes en paralelo, está dotado de un gran dinamismo y da gusto leerlo.

En fin, un episodio nacional espléndido y una novela histórica de mucho mérito, que parece ser la mejor de esta autor.

Plaza del Castillo de Pamplona

Rafael García Serrano (Pamplona, 1918-1988) fue un periodista y escritor español. Estudió Filosofía y Letras en la Universidad de Madrid y estando en la facultad, ingresó en Falange Española. Fue miembro fundador del Sindicato Español Universitario (SEU) y colaboró en los medios falangistas de antes de la guerra. El empezar la Guerra Civil española se unió a los sublevados en Pamplona y participó en la toma de la ciudad, bajo el mando del General Mola. Contrajo la tuberculosis en la Batalla del Ebro y estuvo una temporada ingresado en un sanatorio, lo que aprovechó para escribir un libro.

Fue director durante algún tiempo de Arriba órgano oficial de Falange Españolay de la revista Haz. Publicó en varios diarios franquistas y fue un escritor prolífico: publicó 9 novelas la mayoría sobre la guerra, que le marcó profundamente, 5 libros de relatos, 5 libros de viajes y 7 ensayos. Se casó y tuvo 7 hijos. Su esposa falleció a los 54 años de una neumonía. Gran narrador de ambientes y costumbres, sus libros permiten reconstruir la vida cotidiana de su época. 

Rafael García Serrano

Publicado por Antonio F. Rodríguez.

2 comentarios:

  1. Estupenda reseña Antonio. García Serrano es de esos escritores que "ganó la guerra, pero perdió los manuales de literatura", en redonda frase de Andrés Trapiello. Falangista bronco, se adaptó bien al franquismo. Gracias por recordarnos esta novela, que debe leerse como testimonio histórico y como buena literatura. Es un autor incómodo por su ideología, pero con el paso del tiempo las aristas políticas se van limando, y queda lo importante: era buen o mal escritor. Pues la mayoría coincide en que el navarro García Serrano, gran amigo de Hemingway por cierto, era un buen escritor.

    Un cordial saludo.

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  2. Gracias por el comentario, Alberto. No se puede explicar mejor. Salud y libros.

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