Título: Nación
Autor: Terry Pratchett
Páginas: 352
Editorial: Timun Mas
Precio: 17 euros
Sitúate en un archipielago perdido en los mares del sur, de esos habitados por lo que históricamente han sido denominados «salvajes» en el mundo occidental. Mau, un joven adolescente, finalizando su ritual para convertirse en adulto, navega de regreso a su isla, la Nación. Y en ese momento, en ese preciso instante, se acaba el mundo, en forma de una gigantesca ola que arrasa con todo lo que encuentra a su paso, sumergiendo islas, destruyendo poblados y dejando a nuestro protagonista completamente solo en el mundo, a excepción de la chica con pantalones, cuyo barco ha sido estrellado por la misma ola en medio de la selva.
A pesar de esta trágica premisa, el autor es capaz de crear una entretenida comedia capaz simultaneamente de sacarte una sonrisa y de tratar con seriedad temas como la identidad personal, la fe en relación con el conocimiento y el concepto de nación. La novela podría considerarse de fantasía, pues se situa en un mundo paralelo para lograr una mayor libertad narrativa, pero los detractores del género pueden estar tranquilos y saber que disfrutarán de la historia sin encontrarse con los tradicionales elementos asociados a él. De lectura fácil y absorbente, es una novela que muestra cómo los personajes evolucionan a través de las circunstancias en las que se ven envueltos, y que permite al lector pasar un buen rato sonriendo mientras disfruta de la historia.
Terry Pratchett, nacido en Beaconsfield, Inglaterra, el 28 de abril de 1948, es fácilmente mi autor preferido. Comenzó su carrera como periodista en varios periódicos entre 1965 y 1981, para luego convertirse en relaciones públicas de una central nuclear durante seis años. En 1971 publicó su primera novela, continuó escribiendo y publicando en su tiempo libre hasta que en 1987 decidió dejar el trabajo de relaciones públicas para dedicarse por completo al trabajo de escritor, decisión bastante acertada pues actualmente es el segundo escritor más leído del Reino Unido. Es mundialmente famoso gracias a la saga de Mundodisco (de la que ya hablaré en otro momento), que actualmente va por su trigésimonovena novela, en la que combina un mundo fantástico con un delicioso humor plagado de referencias a nuestro propio universo.
A pesar de esta trágica premisa, el autor es capaz de crear una entretenida comedia capaz simultaneamente de sacarte una sonrisa y de tratar con seriedad temas como la identidad personal, la fe en relación con el conocimiento y el concepto de nación. La novela podría considerarse de fantasía, pues se situa en un mundo paralelo para lograr una mayor libertad narrativa, pero los detractores del género pueden estar tranquilos y saber que disfrutarán de la historia sin encontrarse con los tradicionales elementos asociados a él. De lectura fácil y absorbente, es una novela que muestra cómo los personajes evolucionan a través de las circunstancias en las que se ven envueltos, y que permite al lector pasar un buen rato sonriendo mientras disfruta de la historia.
Terry Pratchett, nacido en Beaconsfield, Inglaterra, el 28 de abril de 1948, es fácilmente mi autor preferido. Comenzó su carrera como periodista en varios periódicos entre 1965 y 1981, para luego convertirse en relaciones públicas de una central nuclear durante seis años. En 1971 publicó su primera novela, continuó escribiendo y publicando en su tiempo libre hasta que en 1987 decidió dejar el trabajo de relaciones públicas para dedicarse por completo al trabajo de escritor, decisión bastante acertada pues actualmente es el segundo escritor más leído del Reino Unido. Es mundialmente famoso gracias a la saga de Mundodisco (de la que ya hablaré en otro momento), que actualmente va por su trigésimonovena novela, en la que combina un mundo fantástico con un delicioso humor plagado de referencias a nuestro propio universo.
Terry Pratchett
Publicado por Daniel Rodríguez.
Terrible! ni un triste comentario sobre pratchet.
ResponderEliminarMundo gris en el que vivimos.
Son tiempos oscuros. El que tenga oídos que oiga.
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