Claroscuro - Nella Larsen

              

Título: Claroscuro 
Autora: Nella Larsen 

Páginas: 196 

Editorial: Contraseña 

Precio: 11 euros 

Año de edición: 2016

Es obvio que uno de los muchos placeres que nos ofrece la lectura es el descubrimiento. Descubrimiento de lo ajeno a nosotros. En unos casos lo que nos subyuga es el tiempo diferente al que nos ha tocado vivir, en otros, el espacio muy alejado del nuestro, o puede ser la temática/problemática que desconocemos totalmente por no vividas.

En «Claroscuro» se dan prácticamente todas las condiciones de lo distinto a nuestro conocimiento: Espacio: Harlem; Tiempo: 1927; Temas: las distintas estrategias de supervivencia de personas negras para sentirse integradas en una sociedad que, a pesar de la abolición de la esclavitud en 1865, seguía rechazándolas abiertamente. Sin embargo, muchas cosas habían cambiado ya para algunos pocos que habían podido estudiar y prosperar dando servicio con sus conocimientos a sus iguales. Médicos, abogados, maestros y otros muchos técnicos y especialistas que habían accedido a sus títulos con gran esfuerzo y en la mayor parte de los casos en universidades y escuelas especiales para negros, recibían unos salarios que sin ser los de los blancos, estaban muy alejados de los que quienes eran empleados en trabajos de poca o nula especialización. 

 A pesar del progreso, seguían viviendo agrupados en determinadas zonas, entre ellas el famoso Harlem. Allí vivía también esa clase media, que, como narra la autora, lejos de valorar sus diferencias, se miraba en el espejo de los blancos a los que intentaba emular y caía así en todas las excentricidades y la sofisticación de aquellos a los que imitaba.  La diferencia en sus vidas sociales era que mientras la de los blancos estaba blindada a los negros, éstos aceptaban a algunos blancos que se les acercaban llamados por el esplendor de artistas -especialmente músicos y cantantes- del Harlem mítico, ese barrio nacido de la exclusión.

La novela nos va produciendo cierta inquietud al adentrarnos en la vivencia de las dificultades y sufrimientos de aquellas personas negras que denostaban el color de su piel al punto de intentar y en ocasiones lograr -quienes por su mestizaje podían pasar por blancos- engañar y hacerse un hueco en la sociedad de los blancos.

La materialización de esta difícil de cumplir aspiración está encarnada en Clare, antagonista del personaje principal, Irene, quien, aunque también pudiera pasar por blanca, no tiene más aspiraciones que mantener su cómoda, segura y tranquila vida burguesa de esposa casada con un negro y madre de dos hijos «oscuros». 

La trama nos va desvelando la tensión que se produce entre las dos amigas de infancia al restablecer su relación. Los personajes se van dibujando poco a poco y van descubriéndose al lector como seres con muchos matices, muy bien definidos y que sorprenden al final por sus respectivas evoluciones.

Es una novela que, de forma sencilla, sin dar opción a la sensiblería, nos brinda la oportunidad, a quienes no tenemos problema de mestizaje, de acercarnos a la vivencia de una situación compleja que nunca podríamos conocer si no fuera por la literatura o el cine. A mi juicio, Nella Larsen fue muy valiente, pues, al igual que en su otra célebre novela «Arenas movedizas», más autobiográfica que ésta, muestra también lo que no le gusta de la sociedad negra y lo hace sin contemplaciones.

Una muy buena lectura en la que se siente palpitar la sinceridad.

Nella Larsen 

Nella Larsen (Chicago, 1891- NuevaYork, 1964) cuya madre era de origen danés y padre antillano, tuvo una infancia desgraciada pues su padre desapareció muy pronto, la madre se casó con un blanco y fue rechazada y alejada del hogar. Estudió enfermería y trabajó como voluntaria en una biblioteca. Se casó con un importante científico -segundo afroamericano estadounidense laureado en Física- lo que hizo que pudiera dejar de trabajar, ascendiera de clase social y disfrutara de sus ventajas.

Viajó a España (Mallorca) y París con una beca Guggenheim -la primera que se concedía a una mujer afroamericana-. A la vuelta comenzó una época difícil para ella, pues se divorció y fue acusada de plagio por uno de sus cuentos, todo lo cual le impulsó a decidir dejar de escribir y volver a su trabajo en el hospital.

Fue autora de solamente dos novelas -la tercera fue rechazada- y algunos cuentos, y a pesar de tan poca producción tuvo éxito y fue distinguida entre las pocas escritoras reconocidas en el Harlem de la Renovación. La editorial zaragozana Contraseña, una vez más, ha apostado por sacar a la luz obras de interés que permanecían desconocidas y les ha dado, en el caso de las dos novelas de la autora, «Claroscuro» y «Arenas movedizas», además de unos interesantes prólogos de la estudiosa Maribel Cruzado, una cuidada traducción, amén de las deliciosas portadas de Sara Morante y Elisa Arguilé respectivamente. 

Publicado por Paloma Martínez.