Título: Una liturgia común Autora: Joan Didion
Páginas: 256
Editorial: Random House
Precio: 20,90 euros
Año de edición: 2024
Dice la crítica que ésta es la mejor novela de Didion, una obra inteligente, publicada originalmente en 1977, compleja y fascinante, que narra la vida desordenada y trágica de dos mujeres estadounidenses en Boca Grande, un país centroamericano imaginario. Una es Grace Strasser Mendana, la narradora, viuda del hombre más poderoso del país y factotum nacional, que mueve a su antojo los hilos del poder. La otra, Charlotte Douglas, es una cándida californiana con una hija rebelde y marxista, Marin.
Los personajes de esta novela son personas a la deriva, sin fuerzas ni ánimo moral para ser heroínas en ningún sentido. Grace es una antropóloga formada con Lévi-Strauss, que ha buscado en la antropología respuestas científicas y claras a los misterios de la conducta humana y no los ha encontrado. Después los ha buscado como bioquímica aficionada y ha fracasado igualmente. Es una mujer de 60 años, huérfana, cansada, desengañada, aislada, escéptica y condenada a muerte por un cáncer de páncreas. Charlotte es una pelirroja de 40 años, madre inocente, que ve cómo su amada hija se fuga con un grupo marxista, comete un atentado terrorista absurdo y arruina su vida. El incidente deshace su matrimonio ella se queda desorientada en la vida, pero todavía llena de vitalidad.
El escenario es un pequeño estado, dominado por la corrupción, el tráfico de armas y las conspiraciones, contemplado con displicencia y superioridad por los perdedores estadounidenses que recalan en él. El reverso del sueño estadounidense: la pesadilla americana extendida por el continente. La prosa es dura, seca, cortante, casi hiriente, afilada y cristalina. El lenguaje utilizado es sencillo en apariencia, plano y en ocasiones, casi trivial. Pero por debajo de esa superficie simple y plácida corren aguas turbulentas. Un estilo directo que va muy bien con la historia que se narra. Llama la atención la cadencia, el ritmo con el que se suceden las palabras, las frases y los párrafos, eso es lo que hace que la manera de escribir de Didion sea tan poderosa, que tenga tanta fuerza. Los diálogos son potentes y la autora sabe utilizarlos para contarnos muchas cosas de manera indirecta.
Una novela fenomenal, compleja y torturada, que recuerda a Bajo el volcán por los puntos de coincidencia que tiene con la gran novela de Malcolm Lowry. Un libro trágico, de perdedores y vidas desperdiciadas, que refleja con lucidez y sin paños calientes la arrogancia, la falta de empatía, el poder y la ignorancia de los estadounidenses frente a Centroamérica. Una obra que es un clásico de la literatura norteamericana que ha influido notablemente en multitud de escritores. Una gran novela.
La estupenda traducción del original en inglés es obra de la burgalesa Olivia de Miguel, profesora de la Universidad Pompeu Fabra y toda una institución en el sector. En este enlace se pueden leer las primeras 29 páginas, suficiente para saber si el libro te va a gustar o no.
Joan Didion (Sacramento, 1934-2021) fue una periodista y escritora estadounidense. Empezó a escribir a los cinco años, pero no se consideró a sí misma escritora hasta que no vio publicado uno de sus libros. Lectora voraz desde pequeña, necesitó un permiso de su madre para poder sacar de la biblioteca libros para adultos.
Se graduó en Inglés en la Universidad de California y a los 22 años ganó el premio de ensayo de la revista Vogue. Así arrancó una exitosa carrera como periodista, que le llevó a colaborar en Life, Esquire, The Saturday Evening Post, The New York Times y The New York Review of Books. En solo dos años llegó a ser editora asociada de Vogue y una de las periodistas más prestigiosas y respetadas del país. Se casó con el también escritor John Gregory Dunne, y juntos escribieron guiones, ensayos y participaron en varios proyectos.
Publicó 5 novelas y una larga lista de ensayos, guiones y recopilaciones de artículos. Su obra más conocida es El año del pensamiento mágico (2005), un ensayo sobre la muerte de su marido y su hija, con el que ganó el Premio Nacional del Libro. Dicen de ella que fue la mujer que se convirtió en sinónimo de periodista.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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