Título: Supersaurio Autora: Meryem El Mehdati
Páginas: 328
Editorial: Blackie Books
Precio: 21 euros
Año de edición: 2022
Hoy vengo a hablaros de una de las sorpresas literarias más interesantes y divertidas que me llevado últimamente. Una estupenda novela, muy bien desarrollada, bien escrita, aunque en lenguaje coloquial y de la calle, muy suelta, algo sarcástica, con mucho humor y un desparpajo que quita el hipo. Supersaurio es la historia contada en primera persona, en un monólogo torrencial y envolvente, de una becaria precaria y pringada que entra a trabajar en una omnipresente cadena de supermercados esparcida por todos los rincones de las Islas Canarias.
La protagonista, una hija de inmigrantes marroquíes que se llama Meryem —qué casualidad— es un trasunto de la autora que tiene mucho de ella, pero ¡cuidado!, no todo. La escritora tras estas páginas no ha trabajado en ningún gran supermercado, a pesar de que describe perfectamente el ambiente de trabajo dela empresa. La chica vive cabreada contra el mundo y con razón: está quemada por ser una marroquí despreciada en España con un nombre que nadie ni escribe ni pronuncia correctamente, por vivir en una población turística pensador y para el guiri, sin apenas servicios para los vecinos, porque la meritocracia es un bulo descomunal, porque la gestión de recursos humanos es medieval, porque para más inri quieren aparentar ser guay...
Cosas que ya sabemos, o al menos intuimos, pero que aquí se presentan con generosas dosis de ironía, hallazgos expresivos, contundencia y claridad de ideas, con la virtud añadida de que el texto te transporta y te sumerge en el ambiente que vive y sufre la protagonista. Vamos a ver algunos ejemplos para ver mejor de qué estamos hablando: «No sé qué me enfurece más: si saber que, por mucho tiempo que lleve aquí, para alguna gente jamás seré de aquí, o el hecho de que tampoco soy ni seré nunca de allí», «Los tíos me aburren y los que no me aburren, me dan miedo», «Mi teoría es la siguiente: el amor y el odio son exactamente lo mismo [...] Son el mismo elemento en distintos estados: uno es líquido, el otro es sólido. El amor fluye, el odio se atasca», «Tengo la certeza de que todo lo que tengo metido en el frigorífico me juzga y me critica en cuanto cierro la puerta», «En mi humilde experiencia, ser mujer consiste en padecer algún tipo de dolor con tu cuerpo desde la adolescencia hasta que te mueres», «En mi religión, creemos que cuando una persona muere, el alma sigue junto al cuerpo hasta que lo enterramos», «Soy una mujer fuerte independiente y completamente desquiciada».
El libro, dividido en capítulos que se titulan con el mes y el año en que se desarrolla la acción, alterna los furiosos y apasionados monólogos de Meryem con los relatos que escribe utilizando los personajes de su curro. El lenguaje es muy fluido, espontáneo, bien trabado; los diálogos son rotundos y creíbles, las descripciones de la oficina, de la isla, de la vida cotidiana, de en qué consiste ser adulto, del capitalismo, de qué es en realidad un súper, una boda típica en Casablanca y mil cosas más son absolutamente geniales y, para ser una autora primeriza, la idea inicial de la novela está desarrollada con un oficio envidiable, con soltura y solvencia.
En fin, una novela sensacional, algo descarada, natural, fresca y ligera, pero con mucho fondo, irreverente, divertida, encantadora, inteligente, un poco gamberra, solo un poco, que dibuja un panorama desolador de la vida laboral en estos tiempos, tan deprimente como cierto, suavizado con un sentido del humor descacharrante. Se podría decir que es algo así como una versión de El diario de Bridget Jones marroquí, canaria, desencantada y precaria, pero con mucha más calidad literaria y sentido social.
En fin, una novela que me ha encantado. Una obra que sirve para actualizar la visión que tenemos del mundo en que vivimos. Una lectura estupenda, redonda que para mí ha sido
una de las sorpresas más agradables de la temporada. Es una de esas raras y bellas ocasiones en las que uno piensa: «Ha nacido una escritora».
Meryem El Mehdati (Rabat, 1991) vino a España con su familia cuando tenía un mes de edad. Se instalaron en Puerto Rico, una localidad turística situada al sur de Gran Canaria. Licenciada en Filología Hispánica, ha sido profesora particular, dependienta, niñera y asistente de dirección.
Empezó escribiendo fanfinction —ficciones de fans, narraciones elaboradas con los personajes de un relato, historia, película o serie popular— en http://fanfiction.net. A los editores de Blackie Book les gustó lo que publicaba y le propusieron escribir una novela. El resultado es Supersaurio, su primera obra, que se ha convertido en un pequeño superventas.
Escribe una columna semanal para el diario La Provincia de Las Palmas. Le gustan la vida tranquila, el café de especialidad, hacerse selfies, pasear, el agua con gas, Karim Benzema y Zinedine Zidane.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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