lunes, 4 de junio de 2012

La vida es sueño - Calderón de la Barca


Título: La vida es sueño
Autor: Calderón de la Barca

Páginas: 247

Editorial: Espasa-Calpe
 
Precio: 6 euros 

Año de Edición: 2006

Pocos clásicos se mantienen tan actuales como «La vida es sueño», que puedo leerse hoy mismo sin que haya perdido ninguna vigencia. Drama filosófico en el que aparecen ya la duda metódica de Descartes, la oposición entre realidad y sueño, y la meditación del individuo sobre qué es la existencia, el gran problema de la filosofía, la conciencia de existir y la oposición entre destino y libre albedrío. Como dice Segismundo, el protagonista:

¿Qué es la vida? Un frenesí.
¿Qué es la vida? Una ilusión,
una sombra, una ficción,
y el mayor bien es pequeño.
¡Que toda la vida es sueño,
y los sueños, sueños son!

Son temas con resonancias orientales, tratados ya por Platón y que están en la raíz de la Filosofía. Está escrita en versos octosílabos, maravillosos, que se deslizan unos sobre otros con gran naturalidad. El lenguaje es solemne, barroco, lleno de figuras retóricas (metáforas, antítesis e hipérboles) de gran belleza. Los parlamentos son impresionantes y abundan los diálogos entre dos personajes en los que cada uno va completando los razonamientos del otro en una especie de monólogo a dos.

En el texto, se mezclan dos argumentos que se entrelazan y enriquecen la acción: la peripecia existencialista de Segismundo y sus problemas para distinguir apariencia y realidad; y la historia de Rosaura, una mujer fuerte y heroica, que logra sus objetivos y cumple su misión en la vida. La complejidad y profundidad de la obra es enorme; en el famoso soliloquio de Segismundo se plantean, cada uno en una estrofa, los grandes temas de debate entre la reforma protestante y la contrarreforma católica.

Pedro Calderón de la Barca (Madrid, 1600-1681), pertenecía a una familia montañesa (de Cantabria) de hidalgos. Estudió en el Colegio Imperial de los jesuitas (hoy Instituto San Isidro de Madrid), en la Universidad de Alcalá y en la de Salamanca, en la que obtuvo el título de bachiller en derecho canónico y civil. Abandonó la carrera religiosa por la militar e inició una vida con algunas pendencias y mucho juego. 

Entró al servicio del Duque de Frías, participó en varias batallas y fué alternando los éxitos de su comedias, muy apreciadas en la corte, con los éxitos como soldado distinguido en mil batallas. Por entrar en sagrado, en el Convento de la Trinitarias de Madrid donde estaba la hija de Lope de Vega, persiguiendo a un actor se ganó la enemistad de Lope y de Fray Hortensio Féliz Paravicino, el gran orador, con los que intercambió puyas varias veces en prosa y en verso. Fué nombrado director del Coliseo del Buen Retiro y Caballero de Santiago. Escribió más comedias, dramas y varios libretos de las entonces nacientes zarzuelas. Llegó a ser secretario del Duque de Alba y, después de tener varios hijos naturales, se ordenó sacerdote a los 51 años. Desaparecido Lope de Vega, murió siendo el autor teatral más popular y respetado de España. Teniendo tan sólo 35 años estrenó esta obra cumbre de la literatura dramática, entre el teatro, la poesía y la reflexión filosófica.

Caballero del Orden de Santiago, Capellán de Honor de S. M. y de Reyes Nuevos en 
Toledo, poeta cómico en quien compitió la invención ingeniosa, con la urbanidad
 y belleza del lenguaje. Nació en Madrid año 1601, y murió allí a los 81 de sus edad.

Publicado por Antonio F. Rodríguez.

2 comentarios:

  1. Muy interesante el comentario.En relación con la influencia de Platón destaca que todos los personajes femeninos de la obra(Rosaura,Estrella y Astrea ) tienen nombres que evocan la luz neoplatónica.Por otra parte destacaría los espacios simbólicos en los que trascurre la obra, por un lado la caverna o torre donde está encerrado el príncipe Segismundo y por otro el palacio.Estos espacios representarían la dualidad instinto-razón que están en conflicto permanente en el mundo barroco.Es una obra clásica que habría que leer y releer y posiblemente Calderón sea el autor más importante del teatro barroco español y europeo.Pilar

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  2. Gracias, Pilar. Muy interesante comentario.

    Salud y libros

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