viernes, 19 de diciembre de 2025

Todo en vano - Walter Kempowski

Título: Todo en vano
Autor: Walter Kempowski
 
Páginas: 352
 
Editorial: Libros del Asteroide
 
Precio: 22,95 euros 
 
Año de edición: 2020

Prusia Oriental. Enero de 1945. Una tensa tranquilidad domina en el este de Alemania. De momento no pasa nada. Pero se rumorea sobre la gran ofensiva que preparan los rusos. El frente dormido va a despertar. La catástrofe alemana es inminente. Hacia la muerte marchan los soldados: curtidos veteranos, jóvenes inexpertos, débiles ancianos. Miles de civiles se apresuran en dirección contraria. Van a pie, en carros tirados por caballos, sobre trineos, en automóviles algunos afortunados. La temperatura desciende muchos grados bajo cero. Empiezan a bailar tímidos copos de nieve. Corre un aire cortante como el hielo. El cielo es gris, plomizo, sin esperanzas. La marea que empuja el miedo avanza penosamente hacia el oeste. Cada kilómetro ganado es una salvación provisional. Los rusos se acercan.  

Todo en vano (2006) cuenta el catastrófico derrumbamiento del Tercer Reich. Walter Kempowski es un escritor poco conocido en España, aunque debiera serlo mucho más. Su historia se centra en una mansión prusiana perteneciente a la nobleza rural menor. 

Allí vive una familia. La madre, una mujer alta, morena, hermosa, silenciosa, aficionada a la lectura intrascendente y con un olímpico desconocimiento del mundo en el que vive. Cree que todavía es posible aislarse como si nada sucediera. Tiene un hijo de doce años. Colecciona cachivaches, no se relaciona con otros niños y su profesor particular gasta perilla. La tía es una vieja fatalista y dura que lleva las cuentas de la casa. Vive en una habitación estrecha, entre viejos recuerdos. Le encanta repetir la frase siguiente: las cosas no son tan sencillas. El padre está ausente, en Italia. No es un soldado del frente, sino un ladrón uniformado, que se dedica al saqueo de los pueblos ocupados por los nazis. La familia se aprovecha de sus latrocinios. 

Alrededor de esta mansión aislada y en decadencia se mueven personajes variopintos. Una violinista nazi con los dientes picados. Un pobre soldado manco. Cierto economista con muletas que colecciona sellos. El excéntrico pintor que desea inmortalizar rincones pintorescos de la gran Alemania. Un alcalde abrumado por las responsabilidades que acaricia una pistola antes de guardarla en el cajón. La joven embarazada que se asusta de su vulnerabilidad. Los nazis irredentos que fantasean con devolver a los rusos más allá de los Urales. El sacerdote gruñón que odia al partido y guarda un secreto. Un silencioso trabajador polaco. Dos criadas ucranianas que siempre están discutiendo. Prisioneros franceses embutidos en gruesos abrigos. Demacrados deportados con uniforme de rayas y las piernas azuladas de frío. Soldados indiferentes, niños alborotadores y un tímido pavo que se esconde. 

En un ambiente gélido y temeroso la mayoría no sabe qué hacer. La incertidumbre paraliza. Domina la simulación. Un mundo se viene abajo. Otro alborea. Nadie quiere indisponerse con los amos que se hunden porque todavía pueden hacer daño. Y los camaradas que llegan despiertan un miedo pavoroso teñido de desprecio racista. Si te vas, lo pierdes todo y puedes morir; si te quedas, quizá sobrevivas, aunque lo pierdas todo. No hay muchas alternativas. El éxodo es cada vez mayor. Se abren zanjas. Se disponen cañones. Patéticos milicianos quieren frenar con su fuerza de voluntad los tanques rusos. La nieve se teñirá de rojo con tanto sacrificio inútil. El telón está a punto de caer. 

En la mansión también se multiplican las dudas. Los rusos no se portaron mal en 1914. Eran caballerosos y elegantes. Hablaban un francés perfecto. Besaban las manos de las señoras. La dueña de la mansión todavía se pone un gorro persa regalo de un oficial zarista. Las cosas puede que no sean tan malas bajo la bota rusa, después de todo. ¿Qué hacer? Por delante de la mansión desfila un cortejo interminable de fugitivos. Dejan atrás el inconfundible rumor de la guerra que se acerca: cielos rojos, estruendo lejano de cañonazos, aviones.  

Todo en vano relata la vida de la gente anónima en la era de las grandes catástrofes históricas. El armagedón de 1945 arrebató la vida a miles de personas, alemanas y no alemanas. Extraviadas en el remolino de la destrucción, fueron incapaces de alcanzar buen puerto. Ya se sabe que la historia destruye a los indecisos y tampoco es del todo justa con los decididos. Walter Kempowski ha escrito una magnífica novela histórica. El estilo es claro, preciso y ligero. Consigue dar vida a un pasado dramático que hoy nos puede parecer remoto. En realidad, está tan cerca de nosotros, que casi podemos tocar sus rescoldos con la mano. Todo en vano es un descubrimiento que el atento lector agradecerá. Magistral. 

Walter Kempowski

Walter Kempowski (1929-2007) fue un escritor alemán nacido en la ciudad de Rostock. Su familia era burguesa y acomodada. El joven Kempowski se salvó del tremendo bombardeo sobre Hamburgo en 1943. Al año siguiente lo enrolaron en las Juventudes Hitlerianas. Más tarde fue correo en las fuerzas aéreas. En la posguerra trabajó en infinidad de empleos. En 1948 sucedió el desastre: durante una visita a su madre en Rostock fue detenido por la NKVD, la policía secreta soviética. Los chequistas decían que era un espía, ni más ni menos. Resultado: 25 años de cárcel. Su madre y su hermano también fueron a dar con sus huesos en la trena. En total, Kempowski pasó ocho años preso.

Ya libre, estudió pedagogía y trabajó como profesor. Sus ideas eran de corte liberal y cristiano. A lo largo de su vida reunió un impresionante archivo acerca de la vida cotidiana de las personas sencillas, que donó en 2005 a la Academia de las Artes de Berlín. En los años 60 comenzó su carrera como escritor. Ha utilizado con gran destreza la técnica del collage en sus novelas, utilizando fotografías, diarios, noticias de prensa, anécdotas o canciones populares. La original narrativa de este autor es apenas conocida en España. Únicamente se ha traducido al castellano su novela Todo en vano. Walter Kempowski falleció en 2007 a la edad de 78 años. 

Publicado por Alberto. 

jueves, 18 de diciembre de 2025

Mapas para extraviarse detrás de uno mismo - Daniel Bolado

Título: Mapas para extraviarse detrás de uno mismo
Autor: Daniel Bolado
 
Páginas: 66
 
Editorial: Cuadernos del Laberinto
 
Precio: 16 euros 
 
Año de edición: 2025
 
Este libro tan pinturero, tan surrealista y paradójico es la última obra, calentita y recién salida del horno, de uno de los escritores más originales  e imprevisibles que conozco, el librero Daniel Bolado, que regenta el establecimiento de ejemplares de segunda mano Libros Dodó y del que ya hemos hablado aquí como escritor insólito y sorprendente.
 
Otros necesitan páginas y páginas para componer una buena obra, pero a Daniel le bastan 49 páginas netas y escurridas, haciendo bueno el dicho de Gracián: Lo bueno, si breve... pues eso. Tenemos aquí 16 relatos,16 fábulas, porque atinadamente señala la poeta Ana María Cuervo de los Santos (París, 1970) en el prólogo, que más que simples cuentos, estos textos filosófico-existenciales están cargados de significados profundos, de trasfondos trascendentes que apenas intuimos, pero que sentimos que están ahí y nos cuestionan desde nuestra perplejidad.
 
Son piezas minimalistas, poéticas, irónicas, paradójicas, surrealistas y algo absurdas, pero llenas de fogonazos iluminadores que reconocemos como verdades incontestables. En cualquier caso, son píldoras literarias altamente concentradas, que no es prudente tomar todas seguidas, de golpe, porque emborrachan el raciocinio y se suben a la cabeza. Es mejor leer este libro en pequeñas dosis, un cuento cada ocho horas, como mucho, y nunca antes de conducir o manejar máquinas pesadas.
 
Aquí encontramos el discreto olor de algunos sueños, el animal que solo pueden sentir los ciegos, un sepulturero fabricante de relojes, el animal sin espalda, el minúsculo ataúd, una historia del gran ajedrecista Philidor, un homenaje a Patones de Arriba, el arte de abonar el vacío, la estatua hecha de humo, la cueva de las risas y otras poéticas fascinantes, que nos encantan, aunque no acabemos de entender bien por qué. Estos relatos, a medio camino entre el aforismo extendido y la fábula filosófica, nos recuerdan a Marcel Schwob, a Gómez de la Serna, a Borges, a Monterroso, e incluso a Cortázar. Nos sacan bruscamente de la realidad que conocemos para hacernos reflexionar sobre nuestra propia humanidad y sobre el mundo que nos rodea.
 
Un libro encantador, que no se parece a nada de lo que hayáis leído hasta ahora. Una obra inolvidable, muy útil para evitar que la realidad nos convenza de que todo es razonable y sensato, porque en el fondo sabemos que no es así. Un conjunto de mapas mentales para extraviarse y de esa manera, aunque parezca mentira, conocernos mejor a nosotros mismo y a nuestros rincones más ocultos. Una joyita. un alarde de prosa poética. En este enlace pueden descargarse en formato PDF el prólogo y los dos primeros capítulos. 
 
Daniel Bolado (Veracruz) es un escritor y librero mexicano. Ha vivido en varios países, como Israel y Grecia, antes de establecerse en Madrid. Lector ávido y empedernido, siempre ha sido muy activo en el mundo de las letras. Ha colaborado en revistas, periódicos y colaborado con sus textos en radio y cine.
 
Ha presentado espectáculos poético-musicales en la Casa América, el centro Conde Duque y diversas salas de Madrid. Ha publicado con la editorial Taller Ditoria Fragmentos y fantasías y De cómo introducir un cadáver en un bolsillo» y en Cuadernos del Laberinto, Leyendas topográficas y estos Mapas para extraviarse detrás de uno mismo. Actualmente, regenta una maravilla de librería de segunda mano en la calle Vallehermoso número 35, llamada Libros Dodó, porque atesora volúmenes que le parecen libros raros, extintos y resucitados. Allí se pueden encontrar varias de sus obras. En cualquier caso, un rincón fascinante para los amantes de los libros.
 
Daniel Bolado
 
Publicado por Antonio F. Rodríguez. 

miércoles, 17 de diciembre de 2025

Comerás flores - Lucía Solla Sobral

Título: Comerás flores
Autora: Lucía Solla Sobral
 
Páginas: 248
 
Editorial: Libros del Asteroide
 
Precio: 19.95 euros 
 
Año de edición: 2025

Marina es una joven gallega que se encuentra en una situación complicada en su vida: es recién licenciada, desea independizarse y vivir sola, iniciar su trayectoria como periodista musical, pero acaba de perder a su padre, un gran referente en su vida, con el que estaba muy unida. La inestabilidad en el trabajo y la dificultad de la vivienda la empujan a irse a vivir con Diana, su gran amiga y cómplice en sus correrías.

Conoce a Jaime, un hombre cuarenta años mayor que ella, con una hija casi de su edad, creador de ambientes o compositor de atmósferas, una persona de éxito, atractivo, culto, bien situado social y económicamente, elegante y muy atento con ella y con su familia, con carisma, que sabe qué ofrecer a cada persona para que se sienta especial y lo hace tanto en su trabajo como en la vida privada.

Los dos se enamoran locamente e inician una relación apasionada, Marina está desubicada, en una situación emocional vulnerable, y con Jaime siente que va a tener todo lo que necesita: amor intenso, apoyo, seguridad, comprensión, aparte de una vida cómoda en una casa de ensueño con cenas en restaurantes caros, lujos y regalos.

Marina no es una adolescente insensata, tiene 25 años, es una chica adulta y formada, con estudios e interés en lo político y lo social, que se enamora locamente de quien no debe, y no ve aspectos que otros si aprecian; va dejando paulatinamente a sus amistades, se va dejando a ella misma de lado y acaba aislada y dependiente, tapando su necesidad de afecto con esta relación; tiene que madurar para darse cuenta de lo que pierde para mantenerla.

La novela muestra un magnífico equilibrio entre la delicadeza lírica de la pasión y la exposición tensa y cruda de la relación desigual, mezcla muy bien la historia de amor tierna y amable con la parte oscura, tirante y con sobresaltos de la relación. No presenta un arquetipo del sujeto manipulador, ni disculpa ni es indulgente con la joven afectada; prescinde de un posible tono moralista sin ser ambigua: Jaime es un tipo atento que la cuida, pero le hace daño, y Marina es una persona llena de zonas grises, en su relato Lucía Solla logra que todo lo que cuenta suene sincero y honesto sin caer en la alternativa de bueno o malo, blanco o negro.

La novela está escrita con un lenguaje claro, sencillo y directo, narrada en primera persona lo que creo que supone una dificultad añadida por el tema que trata; habla de sentimientos como miedo, culpa, rabia, vergüenza y silencio, de amistad, desigualdad y duelo. No está basada en un caso real, los dos personajes están formados a partir de fragmentos de vivencias de amigas y personas cercanas, también de alguna propia de la autora, no es un texto autobiográfico salvo porque autora y protagonista coinciden en el duelo por el padre (incluye varias anécdotas de su progenitor), ambas son veganas y tienen un perro. No son hechos reales, pero sí es la realidad que viven muchas mujeres que no ven el pequeño y silencioso tramo que va del cuidado al control, difícil de ver si no se está atento y el ojo no está entrenado.

Lucía Solla Sobral

Lucía Solla Sobral nació en Marín (Pontevedra) en 1989, estudió en la facultad de Filosofía de Santiago de Compostela. Fue seleccionada en 2023 para la Residencia Literaria de la Cidade da Cultura de Santiago y actualmente reside en Oviedo donde ha creado y coordina el Club de Lectura Salvajes. Aficionada a la escritura desde niña, ha retomado su afición ya de adulta, ésta es su primera novela, con la que ha sido finalista del Premio Cálamo y con la que está cosechando un impresionante éxito en el poco tiempo que lleva publicada. Según manifiesta la autora comenzó a escribir por placer e interés literario, sin más pretensión que disfrutar y entretener, y no esperaba ni de lejos la gran aceptación que ha tenido, el reconocimiento y todo lo que conlleva aparejado.

Publicado por John Smith.