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| Una huelga de obreros en Vizcaya de V. Cutanda |
Título: Arte y transformaciones sociales en España (1885-1910) Autores: Javier Barón y Beatriz Sánchez Torija (comisarios)
Precio: 32 euros
Año de edición: 2024
Actualmente se celebra en las salas temporales del Museo del Prado esta interesante exposición que, bajo el título «Arte y transformaciones sociales en España (1885-1910)», reúne obras de pintura, escultura, dibujo y fotografía que reflejan la interpretación de los artistas sobre las grandes trasformaciones sociales de finales del siglo XIX y principios del XX, unos años en los que se produjeron en España grandes cambios destinados a modernizar el país.
En esta época se desarrolla una nueva corriente artística que podemos llamar naturalismo; anteriormente los temas que desarrollaban habitualmente los pintores eran básicamente temas religiosos, históricos o mitológicos, salvo algunas obras costumbristas y alegres (Alenza, Villamil). A partir de los años 80 del siglo XIX cobra auge una pintura con intención de representar objetivamente aspectos habituales de la vida, sin obviar temas que no son amables por ser faltos de belleza o incómodos por desagradables para la burguesía acomodada. Me refiero a motivos como el trabajo industrial, en el campo o en el mar, el trabajo de la mujer, las enfermedades y los accidentes laborales, la emigración, la pobreza y marginación, la prostitución, la educación, la religión, la enfermedad y la muerte. Tratar esos temas abiertamente fue una dificultad y representó una lucha contra un prejuicio al que se tuvieron que enfrentar los pintores de la época: era mejor no tratar esos temas incómodos, se prefería dejarlos aparte.
Muchas de estas obras naturalistas se presentaban a las exposiciones de Bellas Artes, y una buena parte de ellas fueron adquiridas por el Estado; así el Prado cuenta en sus fondos la mayor colección de pintura social de España. La muestra incluye obras de artistas de la talla de Regoyos, Sorolla, un joven Picasso, Nonell, Solana, los hermanos Jiménez Aranda, Fillol, Casas, Rusiñol, Martinez-Cubells, Iturrino, Benedito, Graner y otros. También incluye un buen número de fotografías de la época, piezas de escultura y de Artes Gráficas. Acompaño al texto de unas imágenes de cuadros de artistas escogidos entre los menos conocidos. En total casi 300 obras, unas veinte de ellas de gran formato y algunas que no han sido expuestas anteriormente, ordenadas en secciones según los temas arriba enunciados.
La exposición está abierta hasta el día 22 de septiembre. Os la recomiendo vivamente, es una gran ocasión de admirar obras menos conocidas y de gran calidad; un plan fantástico puede ser aprovechar cualquier mañana para visitarla antes de ir a por las cañas.
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