Título: Desencajada Autora: Margeryta Yakovenko
Páginas: 144
Editorial: Caballo de Troya
Precio: 14,90 euros
Año de edición: 2020
¿Qué mejor descripción de la emigración que una autobiografía novelada que nos cuenta esa experiencia vital desde dentro, narrada por su protagonista? Esa es la historia de «Desencajada», la vida de una niña que tiene como uno de sus primeros recuerdos ver cómo su padre emigra buscando trabajo, sin saber dónde va acabar su viaje, se instala en España, acaba viajando toda la familia en un largo proceso de desplazamiento, extrañeza, adaptación a medias, nostalgia, reestructuración parcial de la vida cotidiana...
Es la narración, poética, lírica y sensible, que no sensiblera, de una niña aficionada a los huevos kinder, forjada en la soledad, que descubre que se pueden tener dos identidades, dos personalidades y dos timbres de voz, dependiendo del idioma, que descubre el olor del mar. Una cría nacida en un país pobre, de tierra negra y fértil, que se muda a un país rico, donde la tierra es naranja.
La autora nos ofrece en este libro dos cosas impagables. Una indagación sentida y honesta sobre qué siente y piensa una persona cuando se la transplanta de lugar, sobre el duelo migratorio y su último capítulo: la nostalgia, sobre qué significa ser española y todas las fases de la experiencia de adquirir otra nacionalidad, incluyendo el vivir un año sin papeles y súbitamente, salir de la nada legal para existir oficialmente. Y una visión desde fuera de nuestra cultura, iluminadora en sus detalles, como esas dos expresiones que nos definen cuando algo no sale como queremos, «Mañana» y «poco a poco», o la extrañeza de ganar de golpe un apellido y llevar un recuerdo de la madre en tu nombre.
Comprobamos que la segunda generación es la que puede llegar a adaptarse, la que crece en el país de destino; la primera está siempre como de visita, deseando volver a su patria. Que el lugar del que te vas y al que vuelves nunca son el mismo lugar, porque nunca te bañas dos veces en el mismo río y nunca visitas dos veces el mismo país.
Aprendemos que los peregrinos y los migrantes se hacen adictos al horizonte, como apunta Anne Carson, que si te llevas una matrioska a otro país a vivir, a veces hay piezas interiores que ya no encajan, y que finalmente, se puede encontrar paz en el movimiento, en asumir cierto nomadismo.
Una vida novelada profunda, poética y sugerente, llena de matices y, después de la angustia y la nostalgia, también de esperanza. Una obra escrita entre dos culturas, y llena de poesía, con significados de palabras rusas en español que puntean el final de algunos capítulos («La palabra rodina en ruso significa patria»). Un libro que marca, sintético, breve y certero, que describe varias desilusiones, la de la vida en la URSS, la de la sociedad occidental, la de tener que completar un cambio que nadie tiene previsto y, finalmente, un extraño renacimiento. Un libro con el que se aprenden muchas cosas.
Margaryta Yakovenko (Tokmak, 1992) es una escritora y periodista española de origen ucraniano. Nació pocos meses después del colapso de la Unión Soviética. Vino a vivir a Murcia con sus padres cuando tenía siete años. Lleva más de 20 años en nuestro país, se licenció en Periodismo y se especializó en política internacional.
Ha sido editora en Playground y actualmente trabaja en El País. Es una lectora voraz y desmedida desde muy pequeña. Esta es su primera novela. En este enlace podéis leer una interesante entrevista, que le hicieron no hace mucho tiempo.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.