El final del affaire - Graham Greene

                    

Título: El final del affaire
Autor: Graham Greene
 
Páginas: 320
 
Editorial: Libros del Asteroide
 
Precio: 21,95 euros 

Año de edición: 2019

Se dice que esta novela es la mejor del siempre interesante Graham Greene y puede que sea cierto. En cualquier caso es un texto de altísimo nivel, una obra llena de matices, profunda, convincente y de mucho mérito. Evoca con eficacia una historia de amor, o mejor dicho, de enamor, con todo su encanto, sus aristas y sus heridas.

Pero empecemos por el principio. Publicada en 1951, en plena madurez del autor, entre «El tercer hombre» y «El americano impasible», cuenta un romance entre una mujer casada y un escritor, utilizando los recuerdos de él cuando ya ha pasado todo y se encuentra lleno de odio y rencor por todo lo que ha sufrido. Así que, en cierto modo, puede que sea más una historia de odio y celos, que una historia de amor.

El narrador es un tipo manipulador, perverso y lleno de resentimiento, pero lo sabemos enamorado y eso le redime, al menos en parte. El planteamiento de partida es muy interesante: nuestro protagonista coincide casualmente con el marido de su antigua amante, al que conocía de antes, se toman una copa y escucha una confidencia que le deja helado: su amigo sospecha que su mujer le engaña y le pide consejo. No se atreve a contratar a un detective privado y nuestro hombre se ofrece a hacerlo en su lugar.

Así arranca una aventura en la que engaña al pobre marido por segunda vez, traiciona a su antiguo amor y se deja arrastrar por sus menos nobles sentimientos. ¿A dónde irá a parar la aventura? Hay que decir que también es una historia de intriga y suspense, porque todo lo que ocurre es inesperado.

La narración transcurre siguiendo dos hilos paralelos, por un lado los recuerdos del pobre enamorado, que revive su romance en todo su esplendor, y por otro el presente, en el que su peculiar pesquisa le lleva por caminos extraños.

Hay que destacar la descripción de la psicología de la pareja de amantes, compleja y muy real al mismo tiempo. Ella es un personaje femenino fascinante, brillante y puro a su manera, él es un cascarrabias, un hombre amargado y negativo, un racionalista que conoce la felicidad por un tiempo y luego se atormenta cuando se da cuenta de que aquello no puede durar. Porque también es una novela psicológica que muestra profundidades abismales. Por último, hay que decir que también es una novela religiosa en cierto modo, porque al final aparece la fe en Dios como una de las posibilidades en juego, y lo hace de manera natural y creíble.

Y como la acción se desarrolla en el Londres bombardeado por los alemanes en 1939, también puede decirse que esta obra tiene algo de histórica, porque recrea esa atmósfera de miedo cotidiano bajo las sirenas.

Hacia el final de la novela, el protagonista encuentra el diario de ella, lo lee y eso le permite al autor cambiar de punto de vista, darle voz a ella y exponer su versión, con sus propias palabras. El resultado es espectacular.

En fin, una novela conmovedora, real como la vida misma, agridulce como solo sabe serlo el amor, que arranca con una frase antológica («Una historia no tiene ni principio ni fin: uno elige arbitrariamente un momento de la experiencia desde el que mirar hacia delante o hacia atrás») y sigue con un nivel altísimo hasta el final.

Greene es un gran narrador y aquí encuentra una historia que es un filón, un verdadero tesoro, y sabe explotarlo hasta el final. No puedo imaginar cómo podría haberlo hecho mejor. El planteamiento, el tono, el desarrollo y el final son magníficos. Es una de esas novelas que a todo escritor le gustaría haber escrito. Un material de primera.

El argumento es sospechoso de ser autobiográfico, al menos en parte, porque late en este texto una viveza y una autenticidad evidentes, que no se pueden esconder. Muchas de las experiencias que se cuentan están reflejadas con el aroma que deja la memoria y no parecen fruto de la invención. 

Una novela fenomenal, que debe figurar en todas las listas de las mejores novelas del siglo XX. Transporta al lector a un pequeño paraíso de vivencias y sensaciones, no todas agradables, y lo mantiene allí hasta el final.

Hay una versión cinematográfica de 1999, que no conozco, pero que me gustaría ver, dirigida por Neil Jordan, con música de Michael Nyman y dos actores extraordinarios, Julianne Moore y Ralph Fiennes, viviendo un affaire tan intenso como atormentado.

Julianne Moore y Ralph Fiennes dando vida a la pareja protagonista

Graham Greene (Berkhamsted, 1904-1991), escritor y guonista británico, nació en una influyente familia. Su padre fué director de un internado en el que estudió el pequeño Graham y fué tan infeliz que intentó suicidarse jugando a la ruleta rusa. A los 17 años se psicoanalizó durante seis meses, los más felices de su vida según confesó luego. 

                  
Fué miembro del Partido Comunista durante poco tiempo. Estudió en Oxford, trabajó en «The Times», se convirtió al catolicismo, fué espia y autor de novelas de intriga muy famosas y conocidas. Publicó cerca de treinta novelas y se dice que su carrera literaria fué la pantalla perfecta para trabajar para el espionaje británico. Quizás por eso sus historias son tan verosímiles. Se le considera el padre del thriller moderno.

Graham Greene

Publicado por Antonio F. Rodríguez.