Título: Las tempestálidas Autor: Gueorguoi Gospodínov
Páginas: 408 pág.
Editorial: Fulgencio Pimentel
Precio: 25 euros
Año de edición: 2022
Me he leído en febrero el fenómeno literario búlgaro que ha triunfado en España este último año, «Las tempestálidas» de Gueorgui Gospodínov (Yámbol, 1968), una novela de prosa sencilla, plagada de alusiones a grandes obras de la literatura, que ha conseguido calar en los lectores gracias a su original propuesta.
La enfermedad de Alzheimer preocupa mucho en esta ficción a uno de sus protagonistas, el psiquiatra Gaustín, que cree haber encontrado un tratamiento para hacer recordar a mentes desmemoriadas. Se le ha ocurrido construir espacios que parezcan propios de épocas en las que los pacientes de Alzheimer aún conservan toda su memoria, como si la enfermedad fuera un lapsus temporal que con esta reminiscencia pudiera ser capaz de ir recuperándose poco a poco. Pero la idea se descontrola.
Lo de crear estos lugares, de querer ayudar a enfermos, acaba resultando una iniciativa que a mentes sanas resulta atractiva. Eso de vivir en ambientes de otras épocas, que ya no serán únicamente habitaciones o viviendas, ni tan siquiera calles, barrios o ciudades, sino países enteros, causa furor en la población contemporánea que se planteará, referéndums mediante, volver al pasado como si lo retro ya no fuera un coche, unos auriculares o unas gafas, sino toda una vida y un futuro.
Llegados a este punto, y sin desvelar absolutamente nada más de la trama, cabe recordar que hay países que saldrían mejor parados que otros en una mirada al pasado, y que un salto de unas cuantas décadas en un país como Bulgaria es viajar al otro lado del telón de acero.
Publicado por Jesús Rojas.
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