Título: La educación física Autora: Rosario Villajos
Páginas: 304 pág.
Editorial: Seix Barral
Precio: 19,90 euros
Año de edición: 2023
Pocos libros abordan el mundo adolescencia femenina, el de las chicas, y toda su problemática, centrada en el físico. Porque es cierto que en general, y muy especialmente en esos años de cambio, el cuerpo es el campo de batalla donde se dirimen todas las batallas importantes de la mujer. Esta novela sí lo hace de manera muy eficaz, tratando según parece todos los conflictos relacionados con la carne: la falta de aceptación del cuerpo propio, los adultos abusadores que intentan aprovecharse de él, los problemas con la comida, el bloqueo del sexo, las autolesiones como forma insana de enfrentarse a un trauma, la opresión de la sobreprotección de los padres, las dificultades para encajar en alguno de los cánones socialmente establecidos, el machismo en el reparto de tareas... todo un catálogo espinoso de situaciones conflictiva tratadas con profundidad psicológica y calidad literaria.
A finales de los 90, una adolescente de 16 años, que crece en una familia bastante tóxica, decide volver a casa haciendo dedo para intentar cumplir el estricto toque de queda que le han impuesto sus padres: a las 10, en casa. Vuelve de casa de su amiga, donde no sabemos exactamente qué ha pasado y qué le han hecho y tampoco sabemos si el rijoso conductor que la recogerá en su coche llegará a hacer algo inconveniente. Entre esos dos polos de intriga se mueve esta novela, construida como el largo monólogo, contado por un narrador omnisciente, de la protagonista, una chica llena de problemas que, sola en la carretera, repasa sus traumas, deseos, recuerdos, sueños, conflictos y angustias.
La acción se desarrolla casi en tiempo real, desde las 18:15 hasta las 19:45, a lo largo de tres horas y media, que el lector tarda en recorrer aproximadamente el doble, en un ejercicio de hiperrealismo narrativo muy sugerente. La autora ha elegido los años 90 para situar la narración en una época lo suficientemente cercana para que nos ataña lo que cuenta y lo bastante lejana para poder pintar con mayor expresividad una serie de situaciones que, si bien han mejorado socialmente en muchos aspectos, siguen manteniéndose en esencia.
La reproducción del hilo de pensamiento de una chica de esa edad, una largirucha de 1,80 de estatura, que calza un 42, rechaza su cuerpo, es buena estudiante a pesar de todo y no siente más que problemas a su alrededor está muy conseguida y, en conjunto, la novela bien podría servir para un curso de psicología sobre conflictos de la adolescencia. El estilo es resuelto y expresivo, los personajes son algo tópicos, pero funcionan perfectamente como arquetipos de situaciones que todos hemos vivido o, al menos, conocemos. Merece una mención especial la clasificación de tipos de chico que hace la protagonista, es genial. Y curiosamente, con quien se encuentra más a gusto es con un compañero gay, al margen del juego habitual de seducción y que no sigue las reglas sociales habituales.
Como muestra del tono de este texto sorprendente y cotidiano al mismo tiempo, basten algunos ejemplos: «¿Cómo iba a arreglárselas para no parecerse a su madre?», «Porque mamá es un ovillo de lana que se va empequeñeciendo a medida que suelta hebra», «¿Será que las chicas no tienen belleza interior?», «El deporte es cosa de hombres», «Ya tendrá Pablito quien le haga esas cosas», «Piensa que en el fondo el deseo de una chica es solo compasión hacia el deseo del hombre», «Mientras miraba por la ventana de clase, rezó para que ocurriera cualquier cosa en la que ningún cuerpo estuviese involucrado».
En fin, un libro interesantísimo, especialmente para los lectores interesados en la adolescencia, la psicología o el feminismo. Un tour de force de gran dificultad, que la autora solventa con autoridad y de manera brillante. La novela de una pobre chica adolescente sumida en un pozo de problemas. Impresionante. Y uno se pregunta ¿cómo es que no se le había ocurrido a nadie, que sepamos, escribir una obra así? Habrá que seguir a Rosario Villajos a partir de ahora.
Rosario Villajos (Córdoba, 1978) es una escritora española. Según confiesa, dedicó toda su infancia a dibujar, leer y ver películas. Estudió Bellas Artes, ha trabajado en la industria musical, cinematográfica, artística, cultural y hostelera y ha vivido en Córdoba, Sevilla, Granada, Montpellier, Barcelona, Londres y Madrid, pero todavía conserva su acento andaluz.
Buena parte de su creación artística ha versado sobre o efímero, lo pasajero, lo breve. Dice que nada la representa mejor que lo perecedero. Su primera novela fue una novela gráfica, titulada «Face» (2017); luego vendrían tres novelas de texto: «Ramona» (2019), «La muela» (2021) y «La educación física» (2023), con la que ha ganado el Premio el 65 Premio Biblioteca Breve, convocado por la editorial Seix Barral, con una dotación de 30.000 euros. Tiene una página personal muy atractiva aquí.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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