Título: Fieras familiares Autor: Andrés Cota Hiriart
Páginas: 292 pág.
Editorial: Libros del Asteroide
Precio: 20,95 euros
Año de edición: 2022
Hay libros que explotan con fortuna un buen tema y resultan de muy agradable lectura. Y para eso, el mundo de los animales raros y curiosos es un verdadero filón. Eso es lo que hace en este fantástico texto el mexicano Cota Hiriart, naturalista aficionado desde muy niño a los reptiles y serpientes, supongo que para espanto de sus padres, y que llegó, ya de adulto, a ser un profesional respetado.
Estamos ante un libro de memorias de un Gerard Durrell mexicano, entretenido y fascinante, sorprendente y maravilloso, que nos regala historias de bichos y detalles sensacionales, nos contagia por unas horas de su pasión por los animales y nos deleita con un español rico y sabroso, exuberante, plagado de giros deliciosos y frases de máxima expresividad. Porque este hombre, además de un consumado herpetólogo, es un escritor muy divertido y ameno, que conoce los resortes del oficio y sabe, ya lo creo que sabe, redactar estupendamente.
La obra tiene una doble dedicatoria encantadora —A Marcia por consentirme invadir la casa con mis fieras durante tantos años, Y a Álvaro, por arriesgarse a perder algún dedo cada vez que fue necesario— y se divide en quince capítulos organizados en dos partes: una sobre animales en cautividad, en donde nos habla del extraño ajolote, la temible pitón, el antediluviano escorpión emperador y el ominoso cocodrilo de río; y la segunda acerca la fauna que encontró en sus viajes a Galápagos, Borneo, Komodo, Sulawesi y Guadalupe. Cada capitulo tiene una estructura parecida: un bello y detallado dibujo del animal o el lugar del que se trata, una descripción literaria y florida, una ficha con datos descriptivos y u texto en el que se intercalan detalles curiosos e interesantes sobre el tema con las descacharrantes aventuras del autor. El volumen se completa con unas páginas de introducción, otras de epílogo, agradecimientos y una selecta bibliografía.
El conjunto es un libro que es una aventura continua, una sucesión de páginas que nos asombran. Aquí conoceremos al increíble ajolote o monstruo de agua, un anfibio en permanente estado embrionario, el basilisco o lagarto de Jesús, la boa Dulcinea del Toboso, una pitón arco iris, sabremos cómo cambiar un camaleón pantera por una pitón albina, cuál es la técnica del poderoso ataque de una pitón hambrienta, que los escorpiones despiden y ven luz ultravioleta, cómo distinguir a un alacrán venenoso del que no lo es, cómo pasar la aduana con dos serpientes y cuatro camaleones, que la mejor manera de empezar a contar una historia es iniciar otra distinta, el curioso mecanismo con el que los camaleones generan sus increíbles colores, cómo manejar a un cocodrilo escapista, que al mono narigudo los aborígenes lo llaman el mono holandés —por algo será—, que el auténtico mundo perdido es la Isla de Komodo, habitada por dragones que comen una vez al mes, sabremos algo más de los orangutanes, la babirusa, el tarsio, los macacos crestados, la vaca marina y muchos otras fieras asombrosas. Un libro divulgativo que parece un circo.
Mención aparte merecen el extravagante método para escapar al ataque de una anaconda recomendado por la ONU a sus cooperantes en la selva y la infinita paciencia de los padres del autor, que vieron cómo su casa se convertía en un terrario con decenas de vitrinas y cubículos dedicados a la reproducción y cría de reptiles y serpientes.
Una gozada de lectura, amenizada con un verbo fácil y divertido, chocante a veces y siempre lleno de humor, con metáforas y comparaciones algo disparatadas, localismos muy expresivos, una aguda percepción de la estupidez humana, mucho amor por los animales y un gran sentido de la realidad. Las frases son recortadas y certeras, van al grano sin dilación, tienen una gran densidad de información por párrafo y muestran una notable capacidad de síntesis. El lenguaje es vibrante y colorido, sonoro y peculiar, plagado de adjetivos sabrosos, una delicia de expresividad, como se ve en esta frase: «Mijos, no sean pendejos. Se van a totemar los dedos con esos trinques».
Vale la pena traer aquí alguna que otra cita más: «Como dicen, infancia es destino», «¿De qué carácter es el sosiego que experimenta el delfín cuando se intoxica voluntariamente con las toxinas del pez globo?», «Cuanto mayor sea la cola de un alacrán y más débiles sus pinzas, más tóxico será», «Salía el caldo más caro que las albóndigas» (dicho mexicano), «... al suizo con el que compartía camarote no le gustaba sonreír ni bañarse», «En las islas tropicales, Godzilla es más probable que King Kong», «Si los orangutanes no hablan, es tan solo para que no los pongamos a trabajar» (Rousseau), «Algunos orangutanes, llevados a Europa por colonizadores, aprendían a vestirse, a hacer la cama y a utilizar cubiertos de mesa».
En fin, un libro encantador y apasionante, basado en las divertida memorias de un naturalista de raza, descritas de bicho en bicho, con mucho sentido del humor y conocimiento. Una obra fantástica sobre un tema muy atractivo que, la verdad, no se puede tratar mejor.
Andrés Cota Hiriart (Ciudad de México,1982) es un zoólogo y escritor mexicano. Nacido en una familia de clase media alta, mostró desde pequeño una gran afición por los reptiles y las serpientes. Desde niño ha convivido con ofidios y ha compartido habitación durante quince años con una pitón de cuatro metros.
Durante casi una década dirigió la unidad de
conservación de vida silvestre Vida Fría Reproductores, instalada en su casa y dedicada a la
reproducción de reptiles en cautiverio. Ha estudiado Biología en la Universidad Nacional Autónoma de México y
ha cursado un máster en Comunicación de la Ciencia en el Imperial College de
Londres. Ha realizado viajes de observación y estudio de la naturaleza por todo el mundo.
Ha publicado la novela «Cabeza Ajena» (2017) y varios ensayos, como «Faunologías» (2015) y «El ajolote, biología del anfibio más sobresaliente del mundo» (2016). Sus textos han aparecido en diversas antologías y revistas. En 2021 resultó finalista del I Premio de no ficción Libros del Asteroide con «Fieras familiares». Actualmente coordina la
Sociedad de Científicos Anónimos y es conductor del programa de radio y
podcast Masaje Cerebral.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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