Título: Morir
Autora: Cory Taylor
Páginas: 142
Editorial: Gatopardo
Precio: 15,90 euros
Año de edición: 2019
Esta obra sincera, honesta y valiente fué escrita por su autora a los 60 años, cuando vió que el melanoma que le habían detectado hacía 10 años se estaba haciendo dueño de la situación y el final estaba cerca. Sin embargo, no es un ensayo triste ni deprimente. Escrito con una serenidad pasmosa, este libro consuela.
Se divide en dos partes. En la primera, Taylor repasa su situación y reflexiona sobre ella, acerca de la muerte y del último tramo de la vida, en la segunda, repasa su vida y nos ofrece un resumen de su biografía, sensible y penetrante. Las dos partes son maravillosas y constituyen su forma de defenderse de la muerte escribiendo, su manera de gestionarla y aceptarla. Y el resultado es extraordinario.
Escueto, hondo, alejado de toda cursilería, aborda su situación frontalmente y ofrece mucha información curiosa e interesante. Como que a los creyentes les suele resultar más difícil morir, que el suicidio es una posibilidad que conviene tener cerca en algunas enfermedades y que eso ayuda a sentirse mejor, que no lo realizó por consideración a su familia (hay muertes más cómodas para el protagonista, pero más duras para los demás), que estar con los silenciosos cuáqueros la ayudó mucho, la utilidad del servicio que hay en Australia de biógrafos que escriben tu vida...
Todo un recorrido reflexivo por su situación que se completa con una lista de doce preguntas que le hicieron en una entrevista de televisión a la que se prestó gustosa. Cosas como si había hecho una lista de deseos, si había pensado en suicidarse, si se había vuelto religiosa, si tenía miedo, si había algún aspecto positivo en morirse... las cuestiones típicas que se le pueden ocurrir a cualquiera. Y esta australiana las responde con calma y de manera brillante, siempre ofreciendo información interesante, empática y un punto de vista inteligente.
Resulta emocionante ver cómo la escritura de una mujer que vive en las antípodas puede resultar tan cercana, tan próxima y tan relevante para nosotros, para mí por lo menos. Tan reveladora de detalles y aspectos de lo que es este asunto de vivir la vida.
En la segunda parte, el recorrido que hace de su vida es igualmente emocionante y valioso. Cuenta lo importante que ha sido para ella su trabajo y reconoce que nunca ha sido tan feliz como cuando estaba escribiendo. El texto está lleno de destellos reveladores, como la explicación de que cuando repasas tu biografía en detalle te das cuente de que son tus errores y fracasos los que te definen, más que tus éxitos. O la sensación que tiene al final de su existencia de que la vida, en realidad, es simultánea, de que todo sucede a la vez.
Un libro extraordinario por el tema que toca, la calidad humana de su autora y el acierto con el que trata un tema tan tremendo, el tema, el gran tema, el único tema probablemente. Para acabar, no me resisto a mencionar una cita de Harold Pinter incluida en este libro, que le dijo a su mujer cuando el final estaba cerca: «Te echaré tanto de menos cuando esté muerto».
Cory Taylor (Southport, 1955-2016) es una escritora y guionista australiana. Hija de un piloto de aviones, su infancia transcurrió entre Southport, las islas Fidji y Kenia, mientras la familia seguía a su padre en sus destinos. Estudió Historia en la Universidad Nacional de Australia y comenzó a trabajar como guionista de cine y televisión.
Su primeros libros fueron una serie de cuentos para niños. Cuando le diagnosticaron un melanoma en el 2005 comenzó a escribir ficción y ganó el Premio Book de la Commonwealth en 2012 con Me and Mr Booker. Su siguiente obra, My beautiful enemy estuvo nominado para el Miles Franklin Award y su último título, del que se ocupa esta reseña, Morir, publicado un poco antes de que falleciera debido a su enfermedad, fué seleccionado para la última fase del Stella Prize.
Se divide en dos partes. En la primera, Taylor repasa su situación y reflexiona sobre ella, acerca de la muerte y del último tramo de la vida, en la segunda, repasa su vida y nos ofrece un resumen de su biografía, sensible y penetrante. Las dos partes son maravillosas y constituyen su forma de defenderse de la muerte escribiendo, su manera de gestionarla y aceptarla. Y el resultado es extraordinario.
Escueto, hondo, alejado de toda cursilería, aborda su situación frontalmente y ofrece mucha información curiosa e interesante. Como que a los creyentes les suele resultar más difícil morir, que el suicidio es una posibilidad que conviene tener cerca en algunas enfermedades y que eso ayuda a sentirse mejor, que no lo realizó por consideración a su familia (hay muertes más cómodas para el protagonista, pero más duras para los demás), que estar con los silenciosos cuáqueros la ayudó mucho, la utilidad del servicio que hay en Australia de biógrafos que escriben tu vida...
Todo un recorrido reflexivo por su situación que se completa con una lista de doce preguntas que le hicieron en una entrevista de televisión a la que se prestó gustosa. Cosas como si había hecho una lista de deseos, si había pensado en suicidarse, si se había vuelto religiosa, si tenía miedo, si había algún aspecto positivo en morirse... las cuestiones típicas que se le pueden ocurrir a cualquiera. Y esta australiana las responde con calma y de manera brillante, siempre ofreciendo información interesante, empática y un punto de vista inteligente.
Resulta emocionante ver cómo la escritura de una mujer que vive en las antípodas puede resultar tan cercana, tan próxima y tan relevante para nosotros, para mí por lo menos. Tan reveladora de detalles y aspectos de lo que es este asunto de vivir la vida.
En la segunda parte, el recorrido que hace de su vida es igualmente emocionante y valioso. Cuenta lo importante que ha sido para ella su trabajo y reconoce que nunca ha sido tan feliz como cuando estaba escribiendo. El texto está lleno de destellos reveladores, como la explicación de que cuando repasas tu biografía en detalle te das cuente de que son tus errores y fracasos los que te definen, más que tus éxitos. O la sensación que tiene al final de su existencia de que la vida, en realidad, es simultánea, de que todo sucede a la vez.
Un libro extraordinario por el tema que toca, la calidad humana de su autora y el acierto con el que trata un tema tan tremendo, el tema, el gran tema, el único tema probablemente. Para acabar, no me resisto a mencionar una cita de Harold Pinter incluida en este libro, que le dijo a su mujer cuando el final estaba cerca: «Te echaré tanto de menos cuando esté muerto».
Cory Taylor (Southport, 1955-2016) es una escritora y guionista australiana. Hija de un piloto de aviones, su infancia transcurrió entre Southport, las islas Fidji y Kenia, mientras la familia seguía a su padre en sus destinos. Estudió Historia en la Universidad Nacional de Australia y comenzó a trabajar como guionista de cine y televisión.
Su primeros libros fueron una serie de cuentos para niños. Cuando le diagnosticaron un melanoma en el 2005 comenzó a escribir ficción y ganó el Premio Book de la Commonwealth en 2012 con Me and Mr Booker. Su siguiente obra, My beautiful enemy estuvo nominado para el Miles Franklin Award y su último título, del que se ocupa esta reseña, Morir, publicado un poco antes de que falleciera debido a su enfermedad, fué seleccionado para la última fase del Stella Prize.
Cory Taylor
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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