Título: Últimas tardes con Teresa
Autor: Juan Marsé
Páginas: 507
Editorial: Lumen
Precio: 19,85 euros
Año de edición: 2009
«Últimas tardes con Teresa» es una de las grandes novelas espñolas del siglo XX. Tiene el encanto irresistible y familiar de una tarde de verano, y literatura a raudales. Se lee muy fácilmente y parece un exto sencillo,pero tiene mucho truco.
Ambientada en la Barceona de 1956, en pleno desarrollismo franquista, cuenta las peripecias del Pijoaparte, Manuel, un personaje inolvidable y muy conseguido. Un extremeño, un charnego joven y bien parecido que busca echarse una novia de la alta burguesía barcelonesa para salir de pobre. Una historia romántica y a la vez social, e incluso de aventuras.
Dos de las chicas que conoce, Maruja y Teresa, le dan una adecuada réplica y más de una vez, el joven extremeño se ve en la situación del burlador burldado. Los diálogos son naturales y muy creíbles. Los personajes están bien construidos y me parece que este libro no flojea en ninguno de los aspectos que pueden tenerse en cuanta. Una novela redonda y buena, muy buena.
La ciudad y la época que enmarcan la narración están perfectamente descritas. Los guateques, la universidad, los estudiantes, las niñas de papá... en una época en la que todavía nadie se significaba por no quedar clasificado como desafecto al régimen y la juventud desplegaba toda su energía para salir adelante. El texto se comporta como un animal vivo en el que respira y late toda una sociedad.
Leer este libro es realizar un verdadero viaje al pasado, una inmersión en otra época y un periplo en la máquina del tiempo. ¡Qué gozada!
Juan Marsé no hace literatura social ni sigue los cánones de la época, sino que se lanza a escribir y fabular todo, con excelentes resultados. Una novela extraordinaria, empapada de sabiduría de la vida y conocimiento sociológico.
El lenguaje es directo, aparentemente sencillo, poético y evocador. Transmite mucha información de manera indirecta, la más eficaz y completa. Compone un retrato estupendo del Pijoaparte, no diciéndonos cómo es, sino mostrandonos lo que hace y haciéndonos oir lo que dice.
Editorial: Lumen
Precio: 19,85 euros
Año de edición: 2009
«Últimas tardes con Teresa» es una de las grandes novelas espñolas del siglo XX. Tiene el encanto irresistible y familiar de una tarde de verano, y literatura a raudales. Se lee muy fácilmente y parece un exto sencillo,pero tiene mucho truco.
Ambientada en la Barceona de 1956, en pleno desarrollismo franquista, cuenta las peripecias del Pijoaparte, Manuel, un personaje inolvidable y muy conseguido. Un extremeño, un charnego joven y bien parecido que busca echarse una novia de la alta burguesía barcelonesa para salir de pobre. Una historia romántica y a la vez social, e incluso de aventuras.
Dos de las chicas que conoce, Maruja y Teresa, le dan una adecuada réplica y más de una vez, el joven extremeño se ve en la situación del burlador burldado. Los diálogos son naturales y muy creíbles. Los personajes están bien construidos y me parece que este libro no flojea en ninguno de los aspectos que pueden tenerse en cuanta. Una novela redonda y buena, muy buena.
La ciudad y la época que enmarcan la narración están perfectamente descritas. Los guateques, la universidad, los estudiantes, las niñas de papá... en una época en la que todavía nadie se significaba por no quedar clasificado como desafecto al régimen y la juventud desplegaba toda su energía para salir adelante. El texto se comporta como un animal vivo en el que respira y late toda una sociedad.
Leer este libro es realizar un verdadero viaje al pasado, una inmersión en otra época y un periplo en la máquina del tiempo. ¡Qué gozada!
Juan Marsé no hace literatura social ni sigue los cánones de la época, sino que se lanza a escribir y fabular todo, con excelentes resultados. Una novela extraordinaria, empapada de sabiduría de la vida y conocimiento sociológico.
El lenguaje es directo, aparentemente sencillo, poético y evocador. Transmite mucha información de manera indirecta, la más eficaz y completa. Compone un retrato estupendo del Pijoaparte, no diciéndonos cómo es, sino mostrandonos lo que hace y haciéndonos oir lo que dice.
Por supuesto, la mirada que contempla la ciudad no es complaciente ni satisfecha en absoluto, sino desengañada y ligeramente ácida. Por eso creo que esta novela tiene suspense, porque el lector se pregunta continuamente si el Pijoaparte conseguirá conquistar a la chica, se lleva más de una sorpresa inesperada y el desenlace es un bue colofón a toda la historia. Me parece que comparte muchas cualidades de la mejor novela negra, sobre todo por la visión que ofrece de la capital catalana.
Me ha encantado releerla. Si no la conocéis, me daís envidia porque podéis disfrutarla por primera vez y si ya la habéis leído, no viene nada mal volver otra vez de visita a Barcelona en 1956.
Juan Marsé en 1991 (foto CC BY-SA 2.0 Elisa Cabot)
Juan Marsé (Barcelona, 1933) es uno de los miembros de la llamada generación de los 50, por la que siento especial predilección. Ese grupo de escritores hijos de la Guerra Civil
española, que comenzaron a destacar en el páramo cultural de aquella
época, tras el atroz desmoche que supuso la guerra y sus consecuencias.
Estuvo viviendo durante algunos años en París, trabajando como profesor de español, traductor y mozo de laboratorio.
Tiene casi tantos premios como libros publicados, ha obtenido el Premio Cervantes, dos veces el Premio de la Crítica, el Premio Nacional de Narativa, el Premio Juan Rulfo, el Planeta y el Ateneo de Sevilla, entre otros. Nacido en una familia obrera muy humilde, se hizo escritor famoso a fuerza de ganar premios.
Estuvo viviendo durante algunos años en París, trabajando como profesor de español, traductor y mozo de laboratorio.
Tiene casi tantos premios como libros publicados, ha obtenido el Premio Cervantes, dos veces el Premio de la Crítica, el Premio Nacional de Narativa, el Premio Juan Rulfo, el Planeta y el Ateneo de Sevilla, entre otros. Nacido en una familia obrera muy humilde, se hizo escritor famoso a fuerza de ganar premios.
Aquí os dejo una larga entrevista que le hicieron en 1979 en la que habla de su literatura con calma y en profundidad, y cuenta cómo paso de ser un trabajador manual al olimpo de los grandes escritores.
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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