No os lo váis a creer, pero durante e siglo XIX y parte del XX hubo en el Vall de Ribes, en Girona (Cataluña) una comunidad de hasta cien personas de muy corta estatura, pelo rojo, bocio (enfermedad de la glándula tiroides) y aspecto extraño, que fueron rechazados y aislados en el bosque por los lugareños, hasta el punto de que no se les dejaba enterrar a sus familiares en el cementerio.
Veamos cómo los describe un periódico de la época:
«Miden
máximo un metro y quince centímetros de altura, tienen el metacarpo
excesivamente desarrollado, son bastantes anchos de cadera, y eso comporta que
parezcan más robustos de lo que son en realidad. Los rasgos faciales son tan
típicos que, cuando se ha visto uno, se los ha visto a todos. Si no fuera por la
ropa que llevan no se distinguiría un hombre de una mujer. Todos tienen el pelo
rubio, descuidado, y la cara redonda. Pómulos prominentes y las mandíbulas muy
desarrolladas les dan la apariencia cuadrada . La nariz es chata, la boca grande
y los labios carnosos, No tienen los ojos horizontales; los lacrimales están más
abajo que la cola de los ojos, lo cual les hace parecidos a los chinos. Todos
los hombres son imberbes».
«Viven en general abandonados,
cuidan del ganado especialmente porcino y duermen en corrales con forraje por
cama y por abrigo; machos y hembras haciendo en algunos lugares vida común,
cometerán sin duda inconscientemente y con la mayor desazón todo tipo de
bestialidades y actos sexuales. A los menos idiotas se los dedica a
pastores y ganaderos. Beben agua de la fuente de la Margarideta, viven en
malas bordas, no observan ninguna prescripción de higiene, su instrucción es
casi nula y carecen por completo de ninguna otra educación que la del
Padrenuestro, encontrándose dominados por dos vicios: el egoísmo y la
lujuria».
En catalán, goll es bocio, así que los golluts son algo así como los bociosos. ¿Eran enfermos, una raza diferente, un producto de la endogamia y el cretinismo? No se sabe. Lo que sí es cierto es que el último de esos misteriosos seres murió en 1980, cuando alguien le disparó con una escopeta de caza cuando caminaba de Ribas hacia Pardines.
Una historia increíble.
Boda de golluts
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
Una historia esperando a un gran escritor.
ResponderEliminarInteresantísimo. Muchas gracias por el descubrimiento,
ResponderEliminarPML
No sabia esta historia.Me da una tristeza enorme saber que existieron unos seres,que ya por su morfologia la vida debia ser un calvario,ademas se les confino a un lugar apartado y se les condeno a una vida muy triste y dificil.Creo que ya debe ser una raza extinta por culpa de una sociedad que cada vez me averguenza mas.
ResponderEliminarParece ser que ellos mismos deseaban vivir apartado
EliminarGracias por el comentario. Sí es una historia tan terrible y triste como desconocida. Parece mentira.
ResponderEliminarSalud y libros.