Título: Esperando a Míster Bojangles
Autor: Olivie Bourdeaut
Páginas: 150
Editorial: Salamandra
Precio: 16 euros
Año de edición: 2017
Aquí tenemos el último superventas que ha escalado todas las posiciones en las listas de ventas francesas y se está vendiendo como rosquillas al otro lado de los Pirineos. Se trata de una historia alocada y llena de una fantasía desbordante, que a veces recuerda los mejores libros de Boris Vian («La espuma de los días») y arranca con la narración de un niño que ve cómo sus padres, unos personajes bastante excéntricos, bailan llenos de amor «Mr. Bojangles», un antiguo tema de música country estupendamente inerpretado por Nina Simone.
A partir de ahí, la novela se convierte en un torrente de creatividad, chispa y locura desenfrenada, muy original y refrescante, que se mantiene sin llegar a gotarse en ingún mmento a lo largo de capítulos y capítulos, cosa que tiene mucho mérito. Al público francés, quizás para descansar del cartesianismo de Descartes, le encantan los locos originales, como los surrealistas, Dalí, Buñuel, Fernando Arrabal y otros, lo que quizás pueda explicar el fulgurante y rotundo éxito de este libro.
Finalmente, este texto se convierte en cierto sentido en una obra de suspense, porque el lector se pregunta cómo resolverá finalmente el autor un discurso permanentemente instalado en el desenfreno creativo y sorprendente, en la creatividad más exaltada y alocada. Y finalmente Bourdeaut encuentra una solución brillante, que le permite cerrar el libro satisfactoriamente.
Obviamente, no voy a destripar el final, pero si os diré que sabe a Mr Bojangles, algo dulce, romántico, muy bello, de alegría contenida y traquila, y con un punto de nostalgia a la vez. Una novela estupenda, muy original, bien desarrollada y muy curiosa.
Olivier Bourdeaut (Nantes, 1980), a pesar de ser un lector voraz e impenitente desde niño, nunca fué un buen estudiante. Cosechaba tantos suspensos que se orientó hacia la formación profesional y durante un buen número de años desempeñó los más variados oficios: fontanero, agente inmobilbiario, empleado de unas salinas... hasta que a los 30 perdió su empleo y comenzó a encadenar trabajos temporales de poca monta.
En esos años escribió su primera novela, un relato cínico, duro y triste,según sus propias palabras, que nunca ha llegado a publicar. En el 2015 pasó una mala racha. Estaba deprimido, sin trabajo, aburrido en París y decidió pasar unos días en Altea (Alicante) para cambiar de aires.
Allí, inspirado por la maravillosa canción de Nina Simone, escribió esta novela en siete semanas de frenético trabajo para producir algo radicalmente diferente a su primer texto. El resultado ha sido número uno de ventas en Francia, finalista del Premio Goncourt, está cosechando premio tras premio y es el bombazo del año en nuestro país vecino.
El autor dice que se sigue sintiendo un burro, pero un burro con éxito.
Olivier Bourdeaut
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
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