La pecera - Juan Gracia Armendáriz

Título: La pecera 
Autor: Juan Gracia Armendáriz

Páginas: 404
 
Editorial: Demipage

Precio: 20 euros 

Año de edición: 2015

La última novela de Gracia Armendáriz, publicada el año pasado, toma el título de una cita de un poema de Leopoldo María Panero, «Tengo un pez atado al estómago que se retuerce buscando la sed», y bajo la forma de largo monológo de un hombre dominado por el alcohol, describe su mundo y su visión de la vida, terrible y algo desquiciada.

No es un libro fácil, no es una novela complaciente. Aquí no hay rendición y en realidad, tampoco hay esperanza. Se trata de la crónica desolada y tremenda de un alcohólico, de una persona que descendido a los infiernos, en el camino ha perdido su dignidad y sólo le queda la bebida.

El protagonista es radicalmente aintiheroico: degenerado, destruido, inhumano, sin empatía y devastado por el trago, que le ha cambiado, puede que de manera irreversible. Algún libro de Dostoievsky, la película «Leaving Las Vegas», «Días de vino y rosas»... la adición al alcohol ha sido descrita en pocas obras de arte, no es un tema muy agradable, pero el lector tiene la sensación de que esta novela cubre un hueco que nadie había rellenado completamente.    

En cualquier caso, se trata de un texto escrito por prosista excelente, de un narrador consumado que despliega aquí un lenguaje sincopado, comprimido y muy moderno, innovador y que va directamente al grano, vertiginoso y sin concesiones.

La narración en primera persona se utiliza para acercarse al monólogo interior; hay pinceladas de expresión poética, frases felices, fuegos articiales del lenguaje entre los que el autor se mueve con soltura. Una característica que llama la atención es que, auque no dejan de pasar cosas, en realidad la acción está detenida: No existe un argumento que progrese hacia ningún sitio, sino que se describe un universo cerrado, autosuficiente y autónomo: el de la pecera de alcohol.

Un texto circular, que comienza igual que acaba, con la descripción que de sí mismo da el personaje principal («Soy malo y sentimental»). Así se definía uno de los hermanos Karamazov, otra vez nos encontramos con Dostoievski, y parece que Armendáriz agarra fuerte el hilo de la literatura del genio ruso y se sumerge en un mundo de pesadilla de cabeza, para luego contárnoslo.

En la historia principal se inercalan capítulos que cuentan la historia de varios personajes atrapados por el alcohol, cada uno con sus peculiaridaes. Son relatos dentro del relao principal, que le sirven de contrapunto y de coartada para profundizar un poco más en el universo de los alcohólicos.

Una novela buena, muy buena, con un tema que puede causar rechazo, la perorata de un dipsómano medio desquiciado, pero estupendamente bien escrito. El reto de completar así una novela de 400 páginas sin aburrir está resuelto y conseguido con solvencia, de manera que el resultado es una novela de premio. Difícil, torturada, compleja y dura. Pero una gran novela. 

Juan Gracia Armendáriz (Pamplona, 1965) pasó su infancia entre Estella y Tafalla. A los 16 años los azares de la vida le llevaron a México, donde tocó la batería en un conjunto de rock, leyó a Carlos Castaneda, escribió poesía y supo que padecía una insuficiencia renal.

A la vuelta, estudió Ciencias de la Información (periodismo) en la Universidad de Navarra y se puso a escribir en serio. Ha trabajado para varios medios y ha sido, durante más de quince años, profesor en la facultad de Ciencias de la Información de la Universidad Complutense de Madrid.

Ha publicado novelas, poesía, libros de entrevistas, microrrelatos... en 2007 comenzó a fallar el riñón que le habían transplantado hacía años, lo que le llevó a diálisis, varios intentos de transplante y a su maravillosa trilogía de la enfermedad: «La línea Plímsoll», «Diario del hombre pálido» y «Piel roja». Ha sabido transformar la enfermedad en arte. Es un tipo de una pieza, un hombre con carácter, auténtico, curtido en mil batallas existenciales y uno de mis escritores favoritos. Ahora ha vuelto a las librerías con «La pecera».

Juan Gracia Armendáriz

Publicado por Antonio F. Rodríguez.