Título: La condición humana
Autor: André Malraux
Páginas: 256
Editorial: Planeta
Precio: 9,90 euros
Año de edicion: 1989
Autor: André Malraux
Páginas: 256
Editorial: Planeta
Precio: 9,90 euros
Año de edicion: 1989
Hoy vamos a hablar de un clásico del siglo XX. Publicada en 1933, ganó el Premio Goncourt ese mismo año y se ha convertido en un libro imprescindible para entender la historia del siglo XX. Narra un episodio de la Guerra Civil China (1927-1949) que enfrentó al partido Kuomitang (Partido Nacionalista Chino) de Chang Kai-shek y al Partido Comunista Chino, aliados hasta entonces frente a los llamados señores de la guerra, que finalmente acabó con la subida al poder de Mao al frente de los comunistas y la expulsión de los nacionalistas a Taiwan.
En ese contexto, la novela se centra en la llamada masacre de Shanghái (1927), en la que el ejército de Chang Kai- shek, incitado por los representantes de las potencias europeas con fuertes intereses económicos en el país, apresó y ejecutó a los obreros y sindicalistas del Partido Comunista que habían tomado la ciudad de Shanghái.
La atención del autor se centró sobre todo en los comunistas, que para él sintetizaban mejor que nadie la llamada condición humana: una mezcla de soledad frente al destino, dignidad ante la adversidad, solidaridad con los desfavorecidos y ansia de transcendencia siempre insatisfecha.
El libro tiene muchos puntos de contacto con la novela histórica, el libro de ideas, el existencialismo y la literatura comprometida. Pero su mayor mérito es conseguir un raro equlibrio entre una novela de aventuras, una romántica, una novela histórica y una novela de ideas, en la que se debate sobre capitalismo y comunismo. Una mezcla sabiamente orquestada en la que ningún aspecto predomina y todos se complementan unos a otros creando un curioso efecto global.
Está considerada como una de las obras maestras del siglo XX y, desde luego, refleja muy bien el espíritu del siglo, entre las derechas, la revolución y la corrupción y fracaso de los ideales más altruistas cuando los toca la política. Una obra genial sobre ese animal político que es el ser humano, el compromiso, la revolución, la violencia, el amor y la muerte que debería ser de lectura obligatoria en las universidades, porque da mucho de sí para el debate y la discusión. Y por añadidura, es una gran novela. Muy buena.
André Malraux (París, 1901-1976) fué un aventurero, político y escritor francés, que oadecía el síndrome de Tourette, que consiste en una serie de muecas, guiños, y tics que tanto le distingueron en entrevistas y apariciones televisivas.
Hijo de un corredor de bolsa que se suicidó, nunca guardó muy buen recuerdo de su infancia. A los 18 años abandonó los estudios y se convirtió en autodidacta y dandy. Empezó a ganarse la vida colaborando en revistas culturales y editando libros raros. pero invirtió en bolsa y se arruinó. Trato de robar algunos relieves de los templos de Angkor, en Camboya, pero le detuvieron.
Deambuló por los países orientales, viajó a China y conoció de primera mano los acontecimientos históricos que cuenta en esta novela. Luchó en la Guerra Civil Española orgnizando una escuadrilla de aviones, comprando aeroplanos, organizando el aprendizaje de los pilotos y coordinándolo todo, mientras había repuestos. Colaboró con la resistencia francesa y fué Ministro de Cultura con Charles de Gaulle, se casó tres veces, tuvo cuatro hijos y además le dió tiempo a escribir cerca de veinte libros.
En ese contexto, la novela se centra en la llamada masacre de Shanghái (1927), en la que el ejército de Chang Kai- shek, incitado por los representantes de las potencias europeas con fuertes intereses económicos en el país, apresó y ejecutó a los obreros y sindicalistas del Partido Comunista que habían tomado la ciudad de Shanghái.
La atención del autor se centró sobre todo en los comunistas, que para él sintetizaban mejor que nadie la llamada condición humana: una mezcla de soledad frente al destino, dignidad ante la adversidad, solidaridad con los desfavorecidos y ansia de transcendencia siempre insatisfecha.
El libro tiene muchos puntos de contacto con la novela histórica, el libro de ideas, el existencialismo y la literatura comprometida. Pero su mayor mérito es conseguir un raro equlibrio entre una novela de aventuras, una romántica, una novela histórica y una novela de ideas, en la que se debate sobre capitalismo y comunismo. Una mezcla sabiamente orquestada en la que ningún aspecto predomina y todos se complementan unos a otros creando un curioso efecto global.
Está considerada como una de las obras maestras del siglo XX y, desde luego, refleja muy bien el espíritu del siglo, entre las derechas, la revolución y la corrupción y fracaso de los ideales más altruistas cuando los toca la política. Una obra genial sobre ese animal político que es el ser humano, el compromiso, la revolución, la violencia, el amor y la muerte que debería ser de lectura obligatoria en las universidades, porque da mucho de sí para el debate y la discusión. Y por añadidura, es una gran novela. Muy buena.
André Malraux (París, 1901-1976) fué un aventurero, político y escritor francés, que oadecía el síndrome de Tourette, que consiste en una serie de muecas, guiños, y tics que tanto le distingueron en entrevistas y apariciones televisivas.
Hijo de un corredor de bolsa que se suicidó, nunca guardó muy buen recuerdo de su infancia. A los 18 años abandonó los estudios y se convirtió en autodidacta y dandy. Empezó a ganarse la vida colaborando en revistas culturales y editando libros raros. pero invirtió en bolsa y se arruinó. Trato de robar algunos relieves de los templos de Angkor, en Camboya, pero le detuvieron.
Deambuló por los países orientales, viajó a China y conoció de primera mano los acontecimientos históricos que cuenta en esta novela. Luchó en la Guerra Civil Española orgnizando una escuadrilla de aviones, comprando aeroplanos, organizando el aprendizaje de los pilotos y coordinándolo todo, mientras había repuestos. Colaboró con la resistencia francesa y fué Ministro de Cultura con Charles de Gaulle, se casó tres veces, tuvo cuatro hijos y además le dió tiempo a escribir cerca de veinte libros.
André Malraux
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
Un largamente acariciado proyecto del gran cineasta americano Michael Cimino.
ResponderEliminar