Título: La edad de la ira
Autor: Fernando J. López
Páginas: 320
Editorial: Espasa
Precio: 8 euros
Año de edición: 2014
Un alumno de primero de
Bachillerato en un instituto de Madrid es acusado de matar a su padre, viudo, y
dejar malherido a uno de sus hermanos. Un periodista, interesado en escribir un
libro sobre los asuntos que se cuecen en los claustros y las clases de nuestros
centros escolares, se propone averiguar las intrincadas causas que han podido abocar
a ese crimen tan sorprendente y, sin embargo, verosímil en la airada sociedad
actual.
Si tuviera que
definir la novela con una imagen gráfica escogería la espiral. En el relato, de
manera retrospectiva, no solo asistimos a una conmovedora espiral de violencia.
También se va desarrollando un torbellino de acontecimientos que, lejos de reafirmar
lo presuntamente sucedido, envuelve al investigador de los hechos en un enjambre
de dudas y le induce a una obsesión «hitchcócktica» por desentrañar la verdad
sin trampa ni cartón.
Asimismo, con el
avance de la trama, va surgiendo un aluvión de personajes que configuran una
galería de tipos teñidos de luces y sombras que, al ir sumando sus voces y
visiones del asunto, nos desentrañan el día a día en un centro cualquiera de
secundaria de esta España nuestra.
La novela tiene
apariencia de «thriller», la información se suministra con cuentagotas de una
forma muy original, a base de entrevistas personales, grabaciones y correos
electrónicos, de manera que esas piezas se van reubicando como en un puzle
hasta desvelar la recóndita verdad de los acontecimientos.
Desde otra
perspectiva, la obra constituye un suculento ensayo sobre la adolescencia,
siempre con el peligro de enjaularse en
su torre de marfil, dentro del ecosistema de un instituto. Donde no solo
interactúan alumnos y profesores, sino también padres y miembros del equipo
directivo. Condicionándose unos a otros con sus peculiaridades e intereses. Tan
bien contado que, incita al lector a retrotraerse a su pasado en las aulas y le
reta a enfrentarse con las mismas preguntas que le turbaron en su juventud.
La novela fue
finalista al Premio Nadal 2010 y su autor, profesor de secundaria, se mueve
como pez en el agua para contar lo que ocurre en el ámbito de la educación
desde dentro de las aulas. Para más información sobre la novela y el autor,
leed la entrevista
que Sofía Pérez Mendoza le hizo para eldiario.es. Al igual que la obra, no tiene desperdicio:
Publicado por Adolfo Pérez.
Gracias por una crítica tan generosa y que se adentra, con tanto acierto, en la novela. Es un lujo para un autor dar con palabras y lugares como este. Un saludo, F.
ResponderEliminarRealmente el lujo es que haya autores como Fernando J. López, que además de escribir bien, están atentos a lo que se dice en el ciberespacio sobre su obra y son diligentes para responder enviando un comentario.
ResponderEliminarImagino que tu participacion supone un orgullo para Antonio, el artífice de La Antigua Biblos. Y, por descontado, un honor para este aficionado a comentar aquellos libros que le han hecho bullir las meninges y el corazón.
Adolfo Pérez