Título: Cuentos reunidos
Autora: Clarice Lispector
Páginas: 541
Editorial: Siruela
Precio: 29,80 euros
Año de edición: 2008
Año de edición: 2008
En este libro se reunen setenta y cuatro relatos publicados entre los años 1960 y 1979 de esta gran autora brasileña. No se trata de obras menores, sino que constituyen una panorámica antológica inmejorable de su quehacer literario. Son piezas brillantes, rompedoras, poco ortodoxas, que no narran tramas, sino sentimientos, o mejor dicho sensaciones. No son textos fáciles, Clarice retuerce el significado de las palabras y las usa con una libertad enorme, casi poética, si no fuera porque su cuentos están rotundamente escritos en prosa. Se ha dicho que recuerda a Virginia Woolf y al Joyce de Dublineses, porque utiliza tambien el flujo de conciencia, pero no los había leído cuando comenzó a escribir. Sí conocía a Machado de Assís, a Eça de Queiroz y a Dostoyevski, cuya influencia reconocía, y muy especialmente a Katherine Mansfield, un verdadero modelo para Lispector.
Me encanta esta autora porque todavía resulta vanguardista y rompedora, aunque hayan pasado unos cincuenta años, porque rompe el relato clásico y sigue sus propias reglas, porque sugiere y provoca como nadie, y por lo rabiosamente brillante que resulta su estilo y lo que cuenta. Su escritura es un prodigio de talento.
Clarice Lispector (Chechelnyk,1920-1977), nació en una pueblecito de Ucrania, donde pasaron una noche sus padres, de origen judío, que huían de la revolución rusa hacia Brasil. Hizo la carrera de Derecho y a los 21 años publicó su primer libro, Cerca del corazón salvaje, escrito a los 19, con el que ganó el Premio Graça Aranha e irrumpió como un meteorito en la escena literaria brasileña. Se casó con un diplomático y hasta su separación en 1959 vivió en varios países, ejerciendo de esposa modelo, elegante y culta, y de madre ejemplar de dos hijos. Por un lado deslumbraba con su belleza, casi siempre vestida de blanco, negro o rojo, y por otro lado escribía cuando podía, con la máquina de escribir sobre las rodillas mientras atendía a un retoño. Luego volvió a Rio de Janeiro y murió de un cáncer, siendo muy joven. Escritora de difícil clasificación, original, moderna, sensible, difícil, no siempre se entiende completamente lo que dice, pero siempre brilla, incandescente.
Una autora excepcional, que brilla con luz propia y nos ofrece una visión muy femenina, única, original y vanguardista de la vida cotidiana de sus personajes. Buena, buenísima, todo gran lector que se precie debe conocer a la gran dama brasileña de las letras del siglo XX.
Clarice Lispector
Publicado por Antonio F. Rodríguez.
Fantástico libro, para leer despacio. Sin prisas por terminarlo.
ResponderEliminarUn saludo
Excelente libro, un disfrute de prosa. Muchos saludos
ResponderEliminar